¿Se debe bañar si tiene guayabo? Esto es lo que debe tener en cuenta para que pase rápido

Uno de los efectos secundarios más comunes de estas celebraciones es la resaca, un malestar que puede perdurar por varias horas, pero se tiene claro, ¿qué se puede hacer para evitar o aliviar los síntomas al siguiente día?

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¿Se debe bañar si tiene guayabo?

La resaca es causada por la deshidratación y los cambios químicos en el cuerpo después de consumir alcohol. Los síntomas son dolor de cabeza, náuseas, vómito, fatiga, temblores, entre otros más.

De acuerdo con un experto en medicina interna, bañarse puede ser riesgoso por diversos factores, pues explica que cuando se está bajo los efectos del alcohol, el sistema nervioso central está deprimido, lo que hace que afecte la capacidad para percibir el calor del agua y aumenta el riesgo de quemaduras por agua caliente, ya que no se está consciente de la temperatura real.

Además, la ducha no rehidrata el cuerpo de manera efectiva, ni revierte los cambios, es decir, que esto puede empeorar la deshidratación.

El experto señala que el agua caliente dilata los vasos sanguíneos de la piel y puede provocar una disminución de la presión arterial, lo que hace que aumente la sensación de mareo o de debilidad.

Entonces, ¿qué hacer para aliviar la resaca?

• Hidratación: beber mucha agua es esencial para reponer los líquidos perdidos.
• Descanso: dormir lo suficiente ayuda al cuerpo a recuperarse.
• Alimentación: consumir alimentos ligeros y saludables, teniendo guayabo puede ayudar a estabilizar los niveles de azúcar en la sangre.
• Evitar el alcohol: la única forma segura de evitar la resaca es evitar el consumo excesivo de alcohol.

¿Qué es lo que provoca la resaca?

Son varios los factores contribuyen a esta:

• El alcohol es un diurético, lo que significa que aumenta la producción de orina. Esto lleva a una deshidratación que puede causar sed, dolor de cabeza y fatiga.
• El alcohol puede causar inflamación en el cuerpo, lo que contribuye a síntomas como dolor de cabeza y malestar general.
• El alcohol interfiere con la forma en que el cuerpo procesa el azúcar, lo que puede causar bajos niveles de azúcar en la sangre y síntomas como debilidad y temblores.
• El alcohol puede interrumpir el sueño profundo, lo que contribuye a la fatiga y la irritabilidad al día siguiente.