El estrés electoral es real y muy delicado: ¿cuáles son los síntomas y cómo protegerse?

En época de elecciones es importante poner sobre la mesa el estrés electoral y saber qué hacer ante escenarios que pueden llegar a ser traumáticos para muchas personas.

El estrés electoral es un fenómeno marcado por un aumento en la ansiedad, disturbios del sueño, dificultad para concentrarse, discusiones acaloradas que son insanas y otro tipo de sintomatologías ocasionadas por las elecciones presidenciales.

A causa de esto, tal como anota el Colegio Colombiano de Psicólogos, estudios recientes han encontrado también que la pandemia de covid-19, el clima político y las expectativas por el resultado de las elecciones se han convertido factores estresantes significativos en la vida de los colombianos.

Pedro Pablo Ochoa, psicólogo de la Universidad Nacional de Colombia, terapeuta y director de campos, programas y proyectos del Colegio Colombiano de Psicólogos, respondió para Gestarsalud algunas de las dudas frente al estrés electoral.

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¿Qué señales que pueden indicarnos que estamos estresados en exceso por las elecciones presidenciales?

Son varias. Debemos sospechar que padecemos estrés electoral si tenemos síntomas como fatiga, desesperanza, irritabilidad, dolores de estómago y problemas para dormir.

¿Cómo podemos protegernos del estrés electoral?

El estrés es una respuesta normal, y tiene una función importante para ayudar a resolver problemas, pero el estrés y la ansiedad por lo que podría suceder no son productivos.

Es clave identificar con qué frecuencia habla de las elecciones con amigos o familiares. Si es el caso, trate de limitar el tiempo que dedica a hablar del tema.

También es importante limitar el consumo de información en medios y redes sobre las elecciones. Defina tiempos específicos para informarse sobre el tema, pero tómese un descanso digital.

Además, sea cuidadoso con la información que comparte en redes, no sea parte del problema. Y finalmente, evite entrar en discusiones sobre las elecciones que tengan el potencial de convertirse en un conflicto interpersonal.

¿Cómo calmar la ansiedad causada por la incertidumbre de no saber qué va a pasar?

Si una persona siente que los niveles de estrés son muy altos, es bueno que haga una pausa, se tome un tiempo, salga a caminar, comparta con amigos y familiares haciendo cosas que disfrute.

Es clave igualmente canalizar las preocupaciones en acciones concretas, esto puede marcar una diferencia importante. Por ejemplo, si está estresado por el fraude, ofrézcase como testigo electoral, salga a votar e invite a las personas a hacerlo de manera informada.

Es bueno siempre buscar apoyo social. Es decir, buscar personas con las que pueda hablar de sus preocupaciones, sin que esto lleve a conflictos; o personas que puedan validar lo que siente sin atacarlo, para que pueda expresar de forma abierta su malestar.

También puede participar en actividades significativas. En lugar de obsesionarse con la cobertura de noticias, encuentre una actividad que realmente disfrute y dedique tiempo a realizarla.

Y si siente que el estrés electoral lo está superando y afecta diversas áreas de su vida, busque ayuda con un profesional de la salud mental.

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¿Es probable que al momento de llenar la casilla electoral tengamos algún tipo de sensación que debamos controlar? ¿Cómo podemos hacerlo?

No hay una forma de controlar las sensaciones que pueden aparecer en el momento de votar; pueden aparecer de forma repentina, relacionadas con lo que vemos al llegar a las elecciones, noticias que escuchamos entre otras cosas.

Lo recomendable es tener claro por quién se va a votar previamente al momento de hacerlo, y que corresponda verdaderamente con una identificación con las propuestas de gobierno del candidato por el que se votará. Votar es un derecho, es una forma de participación política básica. Ejercer los derechos ayuda a generar una sensación de tranquilidad.