Truco efectivo para quitar el moho y el mal olor de su maleta de viaje

Viajar o almacenar una maleta por mucho tiempo puede provocar la aparición de moho y mal olor. Afortunadamente, eliminar estos problemas suele ser sencillo con algunos materiales que al combinarlos son perfectos para estos quehaceres del hogar.

Para quitar el moho de una maleta, lo primero que debe hacer es aspirar completamente, prestando atención a las esquinas y compartimientos. A continuación, puede limpiar la superficie con una mezcla de agua y vinagre blanco, un producto natural conocido por sus propiedades desinfectantes. Si prefiere un aroma más agradable, también puede añadir unas gotas de aceite esencial.

Una vez la maleta esté limpia, es fundamental dejarla secar al aire libre, bajo sombra, para evitar la exposición directa al sol, que puede dañar el material. Si el mal olor persiste, un truco útil es colocar dentro de la maleta un recipiente pequeño con bicarbonato de sodio. Este ingrediente es excelente para absorber olores.

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¿Cómo evitar que el equipaje huela a humedad? 

Lo primero que debe hacer es asegurarse de que su maleta esté completamente limpia y seca antes de guardarla. Cualquier rastro de humedad puede ser la causa principal del mal olor. Además, es recomendable guardarla en un lugar fresco y seco, evitando espacios húmedos como sótanos o áticos.

Un truco eficaz para mantener su equipaje libre de humedad es colocar en su interior una bolsita de gel de sílice o una pequeña caja con bicarbonato de sodio. Estos elementos ayudan a absorber y evita que se acumule dentro de la maleta.

Otra opción es usar toallitas aromáticas o bolsitas de tela con hierbas como lavanda o menta. Estos no solo neutralizan el olor, sino que también proporcionan una fragancia agradable. Por último, si viaja a destinos húmedos, es recomendable ventilar la maleta al regresar para evitar que la humedad se quede atrapada en el material.

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¿Qué es mejor, una maleta blanda o dura?

A la hora de elegir una maleta para sus viajes, una de las decisiones más importantes es optar entre una maleta blanda o dura. Ambas opciones tienen sus ventajas y desventajas, por lo que la elección depende de sus necesidades y preferencias personales.

Las maletas blandas, hechas generalmente de materiales como nylon o poliéster, son flexibles y pueden expandirse ligeramente, lo que facilita el ajuste de los artículos en el interior. Son ideales para quienes necesitan flexibilidad adicional y valoran la capacidad de comprimir su equipaje en compartimientos más reducidos. Además, suelen ser más ligeras y pueden ser más fáciles de guardar en compartimientos ajustados, como en el maletero del carro.

Por otro lado, las maletas duras, fabricadas con materiales como policarbonato o ABS, ofrecen una protección superior contra golpes y presión. Son más resistentes al agua y pueden mantener sus pertenencias más seguras en caso de maltrato durante el viaje. Son ideales para quienes transportan artículos frágiles o valiosos. Sin embargo, suelen ser menos flexibles y pueden ser más pesadas.

*Este artículo fue escrito y curado por periodistas del equipo de Robby Bienestar, con apoyo de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto.