Cómo limpiar los zapatos del colegio: no es betún y quedarán brillantes con truco infalible

Afortunadamente, hay algunos trucos que puede usar para limpiar los zapatos del colegio de forma rápida y eficaz, como por ejemplo, saber la forma correcta de limpiar la suela de los tenis blancos, siempre teniendo en cuenta el material.

Por esto, ‘Theresia School’, una tienda virtual especializada en uniformes y zapatos escolares, dio a conocer el ‘tip’ a la hora de la limpieza.

El primer método se trata de limpiarlos con una combinación de agua y jabón neutro, si el material de los zapatos es en cuero:

1. Elimine la suciedad del zapato con un paño seco.
2. Prepare una mezcla de agua y jabón neutro. Humedezca un trapo y limpie todo el zapato junto a sus bordes con movimientos suaves y circulares.
3. Una vez limpios, seque con un paño limpio y seco.

(Vea también: Qué significa tener el armario siempre desordenado, según psicología: emociones, en juego)

¿Cómo limpiar los zapatos por dentro para que no huelan mal?

Limpiar los zapatos del colegio por dentro es esencial para evitar malos olores y mantener la higiene. Es importante tener en cuenta el material de estos, si son de cuero, tela o sintéticos.

Métodos de limpieza

• Ventilación: deje los zapatos al aire libre en un lugar seco y ventilado para que se aireen y se sequen. Esto ayuda a eliminar la humedad y los malos olores.
• Bicarbonato de sodio: espolvoree bicarbonato de sodio dentro de los zapatos y déjelo actuar durante la noche. El bicarbonato absorbe la humedad y neutraliza los olores. Al día siguiente, aspire o sacuda el bicarbonato.

Importante

• No use productos químicos agresivos que puedan dañar los materiales.
• Asegúrese de que los zapatos estén completamente secos antes de usarlos para evitar la proliferación de hongos.

¿Cómo se quita el rechinido de los zapatos?

El rechinido de los zapatos puede ser molesto, pero afortunadamente, hay varias soluciones que se pueden probar para eliminarlo por completo:

Causas comunes del rechinido y soluciones:

Fricción entre la suela y la plantilla:

Solución: espolvorea talco para bebés o bicarbonato de sodio debajo de la plantilla para reducir la fricción. Si la plantilla es extraíble, puede quitarla y espolvorear el polvo directamente en el zapato.

Fricción entre la lengüeta y los cordones:

Solución: aplique un poco de jabón en el cuero en la lengüeta. También puede probar aflojar un poco los cordones.

Humedad:

Solución: deje los zapatos al aire libre para que se sequen completamente. Puede usar un secador de pelo con aire frío para acelerar el proceso, pero no use calor directo, ya que puede dañar los materiales.

*Este artículo fue escrito y curado en algunos párrafos por periodistas del equipo de redacción, con apoyo de una inteligencia artificial que utiliza ‘machine learning’ para producir texto.