Cuide sus almohadas y con simples trucos evite que se pongan amarillas

Las almohadas son un elemento importante en el dormitorio, ya que proporcionan comodidad y descanso durante la noche. Sin embargo, con el tiempo, es común que se vuelvan amarillas debido al sudor, la grasa, el polvo y otros factores.

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¿Cómo lavar las almohadas correctamente?

Lo primero que debe hacer es identificar el tipo de almohada que tiene, debido a que si es de plumas debe tener más precaución al limpiarla. Por el contrario, si es de fibra o espuma, debe tener en cuenta los siguientes pasos:

1. Retirar la funda de la almohada y lavarla según las instrucciones de la etiqueta.
2. Llenar una bañera o un balde grande con agua tibia, agregar detergente suave y remover bien para que este se disuelva.
3. Sumergir la almohada en el agua y presionar suavemente para que los productos penetren. Asegúrese de que esta se encuentre completamente cubierta de agua.
4. Déjela en remojo durante al menos una hora, aunque si la almohada está muy sucia se puede dejar en remojo durante toda la noche.
5. Después del tiempo de remojo, debe vaciar el recipiente y enjuagar bien la almohada con agua tibia. Recuerde que no puede quedar detergente en la almohada.
6. Escurrir el exceso de agua y colocar la almohada en una lavadora para que seque.
7. Es importante no utilizar la secadora ya que puede dañar la almohada. Si es posible, debe colgar la almohada al aire libre para que se seque completamente.

¿Cómo limpiar las almohadas de plumas?

El proceso de limpieza es un poco diferente, así que tome nota para que pueda sacar toda la suciedad y evitar enfermedades:

1. Colocar la almohada en una lavadora grande y agregar detergente suave. No añadir suavizante ya que puede dañar las plumas.
2. Lavar la almohada en ciclo suave con agua fría.
3. Después del lavado, escurrir el exceso de agua y colocar la almohada en una secadora con pelotas de tenis limpias. Este truco ayudará a que las plumas se distribuyan de manera uniforme y la almohada recupere su forma original.
4. Secar la almohada en ciclo suave hasta que termine el proceso. Asegurarse de que las plumas estén completamente secas antes de usar la almohada.

*Este artículo fue creado con ayuda de Robby Bienestar, una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista de Pulzo.