Conocida marca de carros abrió fábrica operada solo por robots con inteligencia artificial

En un acontecimiento sin precedentes, la empresa automotriz china Zeekr, filial del grupo Geely, ha puesto en marcha en su planta de Ningbo, provincia de Zhejiang, la primera línea de producción completamente automatizada con robots humanoides equipados con inteligencia artificial avanzada. Estos autómatas, desarrollados por la compañía tecnológica UBTECH con sede en Shenzhen, representan un hito en la automatización industrial a nivel mundial.

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Los robots, denominados Walker S1, están diseñados para ejecutar tareas complejas en la línea de ensamblaje de vehículos eléctricos. Su funcionamiento se basa en el sistema “BrainNet”, una arquitectura de inteligencia artificial que combina un “supercerebro” para la toma de decisiones y “mini cerebros” en cada robot para acciones en tiempo real.

Esta configuración permite una coordinación eficiente entre los robots, facilitando procesos como el manejo de materiales frágiles y la adaptación a cambios en el entorno de trabajo.

El despliegue de estos robots ha sido posible gracias a la recopilación de vastas cantidades de datos industriales reales, que alimentan una base de conocimientos utilizada para entrenar y mejorar continuamente las habilidades de los autómatas. Este enfoque permite a los robots aprender nuevas tareas y adaptarse a diferentes roles dentro de la línea de producción con rapidez y precisión.

La implementación de esta tecnología responde a la estrategia del gobierno chino de impulsar la innovación tecnológica para enfrentar desafíos económicos y demográficos. La inversión estatal en inteligencia artificial y robótica busca posicionar a China como líder en la industria manufacturera del futuro, promoviendo la adopción de tecnologías avanzadas para mejorar la eficiencia y reducir la dependencia de la mano de obra humana.

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Este avance en la automatización industrial marca un paso significativo hacia la transformación de los procesos de manufactura, con implicaciones potenciales para la economía global y el mercado laboral. La experiencia de Zeekr y UBTECH podría servir como modelo para otras industrias que buscan integrar robots humanoides en sus operaciones, redefiniendo el papel de la inteligencia artificial en la producción moderna.