Una pareja ordenó una pizza por UberEats y le trajeron sándwiches podridos

La compañía suspendió al domiciliario mientras esclarece el caso.

El hecho se presentó en Toronto (Canadá) el pasado domingo, cuando Anna Kotlikova y su novio Blake Weinzettl ordenaron una pizza al restaurante Montanas, a unas pocas calles de su lugar de residencia en los suburbios de la ciudad, indicó CBC news.

El primer problema para la pareja ocurrió cuando el pedido se demoró más de 30 minutos de lo estipulado, y según la localización del conductor en la aplicación, este había tomado una ruta en el sentido contrario del lugar de destino, aproximadamente 15 minutos en la otra dirección, algo totalmente extraño si se tiene en cuenta que el restaurante queda a pocas cuadras de la casa de Kotlikova, añadió el medio.

Kotlikova y Weinzettl publicaron las fotos de lo que les trajeron en sus redes sociales, lo cual se volvió viral. Este no fue el único caso que se presentó esa misma noche con domicilios de UberEats (servicio tercerizado de entrega de pedidos), ya que otro usuario reportó inconvenientes con su comida en el mismo restaurante.

La respuesta por parte de la compañía para resarcir a la pareja canadiense por las molestias fue darles una tarjeta de regalo de 25 dólares y la devolución del dinero del pedido.

Además, Uber aseguró que “continuaremos trabajando con el restaurante y el conductor para entender que pasó. Hemos removido el acceso del conductor a UberEats y Uber mientras investigamos”. Según ellos, el domiciliario tenía una calificación de 4,8 sobre 5, y nunca había recibido queja alguna.