Transmisora Quindío apaga su señal AM tras 42 años y apuesta todo al salto digital: ¿fin o reinvención?

Transmisora Quindío, con una trayectoria de más de cuatro décadas en el espectro radiofónico, ha comunicado que cerrará su transmisión en el dial 720 AM para integrarse plenamente al entorno digital. Aunque la cadena radial aún no ha presentado una notificación oficial al respecto, fuentes cercanas informaron sobre el proceso de transformación tecnológica que atraviesa la emisora, cuyo objetivo es alinearse con los hábitos contemporáneos de consumo de contenidos, principalmente a través de plataformas digitales.

Según información publicada por Crónica del Quindío, la emisora se encuentra en la fase de selección y organización de un equipo de trabajo que liderará el salto tecnológico y creará nuevas propuestas y espacios adecuados para el público digital. Este procedimiento implica no solo un cambio de plataforma, sino también el surgimiento de una estructura interna capaz de atender una audiencia diversa, ahora dispersa entre canales y dispositivos conectados a internet.

Desde su nacimiento el 23 de julio de 1982, Transmisora Quindío se estableció como una señal vital para las áreas rurales del departamento, especialmente tras la desaparición de otras emisoras emblemáticas como Radio Ciudad Milagro y La Voz de Armenia. La emisora surgió en un contexto donde los habitantes, en particular las comunidades cafeteras, carecían de una opción radial que conjugara la difusión de música popular con un informativo local de referencia.

La idea original fue impulsada por James Acosta Campuzano y Elsa Jaramillo Acosta, quienes tras una reunión con el grupo radial Acosta, decidieron lanzar una nueva emisora de carácter netamente popular. Durante los dos primeros meses, Transmisora Quindío transmitió únicamente música, operando con equipos tecnológicos avanzados para la época, lo que facilitó su rápida entrada en el gusto de los radioescuchas.

A lo largo de los años, la emisora continuó ganándose el aprecio de oyentes en las zonas rurales y urbanas, consolidándose como una de las principales fuentes de información y entretenimiento. El paso al formato digital representa, por un lado, el final de una era dominada por las frecuencias de radio tradicionales, y por otro, un desafío y una oportunidad para conectar con nuevos públicos mediante formatos interactivos y accesibles desde cualquier lugar con conexión a internet.

La transición de Transmisora Quindío refleja una tendencia generalizada entre los medios de comunicación, impulsada por cambios tecnológicos y sociales, donde la inmediatez y la adaptabilidad resultan esenciales.

¿Qué ventajas y retos implica la migración de una emisora tradicional al entorno digital?

Esta interrogante se vuelve especialmente relevante ante la transformación que atraviesan los medios regionales. La migración de una emisora tradicional como Transmisora Quindío al formato digital implica adaptarse a nuevas formas de consumo, con audiencias segmentadas y múltiples plataformas de acceso a la información. Entre los beneficios se encuentra el alcance global y la posibilidad de productos interactivos; sin embargo, también surgen desafíos como la necesidad de actualizar conocimientos técnicos y competir en escenarios saturados de contenido.

La experiencia de Transmisora Quindío recalca la importancia de la transformación digital planificada en los medios de comunicación. El éxito en esta transición depende de la capacidad del equipo para crear vínculos cercanos con los oyentes, comprender las herramientas digitales y reinventar el contenido radiodifundido para las presentes y futuras generaciones.