Conectividad que transforma: así lleva el Ministerio TIC la revolución digital a las regiones más olvidadas de Colombia

El Ministerio de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (Ministerio TIC) llevó a cabo su Audiencia Pública de Rendición de Cuentas 2025 desde el malecón del río Atrato, ubicado en Quibdó, capital del departamento de Chocó. Durante el encuentro, la ministra Carina Murcia Yela, acompañada por la viceministra de Conectividad, Gloria Patricia Perdomo, y el viceministro de Transformación Digital, Andrés López, compartieron los avances y resultados alcanzados en materia de transformación digital, poniendo especial énfasis en la participación y el beneficio de las comunidades.

En el evento, se escucharon testimonios de habitantes y comunidades beneficiadas que reflejaron el impacto directo de las políticas. Según Infobae, la ministra Carina Murcia señaló que uno de los pilares ha sido conectar con propósito, llevando tecnología a lugares históricamente olvidados con el objetivo de potenciar la educación, el emprendimiento y la transformación social. Resaltó que la inversión total fue de 1,4 billones de pesos, permitiendo el despliegue de más de 4.000 kilómetros de fibra óptica —un avance que no se registraba desde 2017— y la formación de más de 1,3 millones de personas en habilidades digitales. Para Murcia, el motor fundamental de la gestión es el impacto transformador en la vida de las personas.

La rendición de cuentas destacó que estos logros se distribuyeron en cuatro ejes estratégicos: conectividad, educación digital, innovación y desarrollo de inteligencia artificial. Para el periodo de 2025, se informó que $599.000 millones se destinaron a aumentar la conectividad; $307.000 millones a educación digital; $465.000 millones a innovación; y $58.000 millones a inteligencia artificial. Cada uno de estos pilares busca disminuir las brechas tecnológicas y fomentar un acceso equitativo a los recursos digitales.

Particularmente en el eje de conectividad, la viceministra Gloria Perdomo presentó los resultados del Plan Integral de Expansión de Conectividad Digital. Dicho plan permitió llevar el servicio de Internet a 187.696 hogares de 28 departamentos, dando prioridad a regiones históricamente excluidas. Un elemento innovador destacado fue el programa Juntas de Internet, impulsado por el presidente Gustavo Petro, a través del cual las comunidades autogestionan su acceso digital. José Aldemar Mosquera, residente de la vereda Villa Esperanza, agradeció el impacto positivo de este proyecto y cómo la llegada de la tecnología marcó un antes y un después, sobre todo en el ámbito educativo.

En cuanto a educación digital, el viceministro Andrés López presentó el programa Ciberpaz, que tuvo impacto en 261 municipios y logró formar a más de 1,3 millones de personas en el uso seguro, responsable y empático de las TIC (tecnologías de la información y las comunicaciones). Desde testimonios como el de Yelena Bechara, estudiante de 13 años de Quibdó, se evidenció cómo la formación recibida a través del programa ha mejorado la experiencia y seguridad digital de niños y adolescentes, facilitando tanto el aprendizaje como la proyección a futuro de los jóvenes.

En el ámbito de innovación e inteligencia artificial, se presentaron avances significativos: entre ellos, el desarrollo de las facultades especializadas en inteligencia artificial en Zipaquirá y Usme, así como los resultados del evento Colombia 4.0, que celebró 15 años promoviendo el acceso tecnológico en 11 departamentos. Finalmente, la ministra anunció que Quibdó será sede de Colombia 4.0 en 2026, y el evento evolucionará a Colombia 5.0, reafirmando el compromiso estatal con la descentralización y modernización tecnológica en las regiones.

¿Qué retos persisten para la inclusión digital en zonas rurales?

Esta pregunta surge del contexto expuesto por la Audiencia de Rendición de Cuentas del Ministerio TIC, en la que se presentaron importantes avances en conectividad, educación e innovación digital. Aunque el ministerio destacó notables progresos, como la expansión de la fibra óptica y el alcance formativo de programas como Ciberpaz, la misma narrativa expone el desafío de llegar efectivamente a todas las regiones históricamente excluidas.

Comprender los obstáculos aún existentes, especialmente en áreas rurales, es relevante porque la conectividad y el acceso formativo siguen siendo desiguales en el país, según testimonios y cifras del propio ministerio. Analizar estas barreras permitirá diseñar políticas más concretas e inclusivas, asegurando que la transformación digital beneficie a cada comunidad, sin dejar a nadie atrás en el proceso de desarrollo tecnológico.