Dian responde por quejas en facturación electrónica; “Es una tortura”, le dijo Colmenares

Los reclamos de los usuarios se hicieron más evidentes y reiterativos este viernes en la mañana, y por medio de las redes sociales advirtieron de inconvenientes a la hora de subir información de su facturación electrónica al sistema de la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (Dian).

Uno de los que expuso su molestia en redes fue Luis Alonso Colmenares, que salió a levantar la voz de protesta en nombre del gremio de contadores públicos, pues hay que recordar que el hoy profesor universitario fue presidente de la Junta Central de contadores y subcontador general de la Nación.

Por eso, acudió a su cuenta de Twitter para poner al tanto de la situación a varias agremiaciones de contadores, a dirigentes de la Defensoría de la Dian y a la misma entidad, a la que le dijo que “es una tortura” hacer esos trámites de manera electrónica por estos días.

Así como Colmenares, la W Radio también recogió las quejas de varios usuarios que se mostraron molestos al no encontrar una respuesta, y la emisora publicó un pantallazo de la imagen que aparecía cuando alguna persona intentaba acceder al sistema.

Incluso, en las mismas redes sociales de la Dian hubo quienes le hicieron saber lo que estaba pasando, pues aseguraban que el inconveniente se estaba presentando desde el pasado 17 de agosto.

Dian responde por quejas en facturación electrónica

Fue por eso que la Dian publicó un comunicado, este viernes en la tarde, en el que explicó que los inconvenientes obedecen a “cambios tecnológicos” por un “despliegue importante en el sistema de factura electrónica”, que se inició desde el 18 de agosto.

“Estos cambios tecnológicos requieren un periodo de estabilización que está transcurriendo y que se espera finalice lo más pronto posible”, agregó la entidad gubernamental, y aseguró que en estos tres días ha recibido “más de 9 millones de documentos electrónicos”.

Con este oportuno anuncio de la Dian, los usuarios esperan así que termine de una vez por todas “esa tortura” para tramitar la información.