Anuncian de nuevo polémica fiesta sexual, mientras Cartagena lucha contra la prostitución

La desenfrenada rumba, que el año pasado fue prohibida por la Alcaldía de la ciudad, se hizo tristemente célebre por los excesos que promete a los asistentes.

Con dos videos, los organizadores aseguran que cada cliente tendrá disponibles dos “mujeres latinas”, que los complacerán en un yate de lujo durante cuatro días con sexo, drogas y alcohol ilimitados y otras “sorpresas”.

En octubre de 2017, la promoción de esta fiesta en Cartagena provocó la indignación de los cartageneros por el daño que le hace a la imagen de la ciudad. En su momento, la Alcaldía de Cartagena aseguró que no existía ningún tipo de permiso para hacer esta fiesta y que no permitirían que se hiciera.

No obstante, pese a las intenciones de las autoridades para evitar la fiesta, los organizadores lograron cambiar el destino para garantizar seguridad y discreción a los invitados.

Entre tanto, ahora cuando la ciudad lucha contra el estigma de la prostitución y el proxenetismo, luego de la captura de ‘La Madame’, vuelven a aparecer las piezas promocionales de la misma fiesta que se hará del 14 al 17 de diciembre por 6.000 dólares.

El principal video con el que se promociona la fiesta fue publicado el pasado 24 de septiembre y ya supera las 23.000 reproducción en YouTube.

Además, es el mismo del año pasado, pero en esta ocasión se cuidaron de no poner el nombre de la ciudad en la publicidad y aseguran que se hará en una “isla secreta en el Caribe”. Sin embargo, en otras publicaciones en redes sociales sí mencionan a Cartagena.

En otro video que está circulando, prometen este tipo de fiestas en otra locación ‘Erotic Resort’. En las imágenes se ve a un hombre al que recogen en el aeropuerto y lo trasladan en un vehículo con placas de Colombia a una casa donde está solo con 7 mujeres.

Allí también aseguran que la “isla del sexo” es privada y estará disponible solo para sus clientes.

La controversia en torno a esta fiesta se da porque con lo que ofrecen, vuelve el debate sobre la cosificación de la mujer. Esto porque le prometen a cada hombre que tendrá dos mujeres disponibles todo el tiempo, y que en cualquier momento las puede “intercambiar” con las de otros invitados para tener sexo ilimitado con ellas:

“Todas las chicas están aquí para complacerte y hacerte sentir como un rey. Si tienes alguna fantasía especial, asegúrate de informar al anfitrión o a las chicas y ellas se asegurarán de darles vida. Todas nuestras chicas están probadas y libres de cualquier enfermedad sexual. También hay una regla muy estricta para el uso de condones”.

Además, permiten el consumo de drogas con ellas, así como de alcohol y comidas ilimitadas; pero prohíben tomar fotografías.

Al parecer el público objetivo de la fiesta son los hombres extranjeros, pues en el video promocional, de cerca de dos minutos, aseguran que vivirá “una experiencia salvaje con las chicas más bellas de toda Latinoamérica”.

De hecho, el medio británico The Mirror menciona la fiesta pero su artículo lo presenta en tono promocional, y no crítico.

En 2017, la fiesta fue calificada por ciudadanos de “repugnante”, y pese a que los organizadores niegan trata de personas, y aseguran que las mujeres son mayores de edad y están allí por su voluntad, muchos pidieron la investigación de posibles delitos. Los sacerdotes colombianos también llegaron a pedirle al papa Francisco que exigiera detener la fiesta.

El Gobierno colombiano también prometió que deportaría a todos los asistentes que encontrará allí, pero los organizadores niegan que puedan hacer eso porque la fiesta es “legal”.