Exsocio del presidente de Saludcoop se quedaría con los restos de Cafesalud

Daniel Coronell reveló que los activos de la malograda prestadora de salud están en poder de un consorcio en el que figura MedPlus.

Y esta compañía (que al parecer tiene una filial en Panamá) tiene en su junta directiva a Jaime Barrero Fandiño, una antigua ficha de Carlos Palacino, el hombre señalado de desangrar a Saludcoop a través del desvío de millonarios recursos para la compra de lujos, terrenos y hasta la construcción de un moderno resort en Restrepo (Meta), dice el periodista en la revista Semana.

La investigación de Coronell sugiere que Barrero Fandiño viene por lo que queda de Cafesalud, una de las compañías que integraron a la liquidada Saludcoop, y de la que fue presidente en la época en la que Palacino prefería gastar la plata de los afiliados en exclusivos vuelos chárter, un sueldo de 90 millones de pesos mensuales más bonificaciones que superaron los 1.400 millones y un BMW que habría costado otros 500 millones, entre otros increíbles gastos que salieron del bolsillo de los colombianos.

Coronell dice que detrás de la venta de Cafesalud al consorcio Prestasalud (en la que figura MedPlus de Barrero Fandiño) estaría la intención de seguir desangrando a la EPS. Y tiene razones para pensar que ese sería uno de los objetivos de ubicar en la junta directiva a un hombre que ha servido a las intenciones de Palacino desde que se desempeñaba como curador urbano.

El columnista de Semana encontró que Barrero Fandiño le ha sido útil a Carlos Palacino (libre en Estados Unidos) cuando se trata de negocios multimillonarios. Primero, fue quien otorgó las licencias de construcción para las sedes de Saludcoop en el norte de Bogotá, y después fue pieza clave en la adquisición de terrenos en el sur de la capital colombiana con 16.000 millones de pesos que salieron de Saludcoop, Cruzblanca y Cafesalud.

Además Barrero Fandiño también estuvo en la fundación del hotel y campo de golf Villa Valeria Reservado,  en el piedemonte llanero, construido por la Edificadora Restrepo S.A, propiedad de Palacino, y en la que eran obligados a invertir proveedores y empleados de la empresa solidaria de salud en habitaciones que oscilaban entre los 54 y los 118 millones de pesos, destacó Semana en un reportaje de 2011.