Soldado liberado se desmayó, mientras mindefensa daba efusivo mensaje: "Está deshidratado"

El secuestro de un grupo de 57 uniformados tuvo un final feliz, luego de que estuvieran en poder de las disidencias de las Farc, en la zona del Cañón del Micay,  en el municipio de El Tambo, Cauca, durante cerca de 48 horas.

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Se trata de cuatro suboficiales y 53 soldados profesionales que fueron retenidos por aproximadamente 200 personas, presuntamente constreñidas por el ala armada organizada residual Carlos Patiño, mientras cumplían labores constitucionales en la región.

Durante la tarde de este lunes 23 de junio, el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), la Defensoría del Pueblo y el Ejército Nacional llegaron hasta ese lugar para recibir al grupo de militares, después de que se llevara a cabo una gestión diplomática para lograr su libertad.

Una vez se dio ese hecho, en el que los 57 uniformados volvieron a las tropas de la Tercera División, el ministro de Defensa, Pedro Sánchez, y el ministro del Interior, Armando Benedetti, entregaron un parte de tranquilidad por la liberación de los soldados y encabezaron un acto en el que dieron un mensaje de motivación a los militares que recobraron su libertad.

El ministro de Defensa emitía unas emotivas palabras a la tropa, mencionando: “Bienvenidos a la libertad”. Posteriormente, Sánchez expresó a los liberados que aunque no los conoce a él y a sus familias, se sentía “supremamente orgulloso de ser su ministro de Defensa”.

Mientras les contaba que él también lució “35 años ese uniforme”, un soldado se desplomó de manera sorpresiva y cayó al piso, ante la mirada preocupada de varios de sus compañeros, que se acercaron para intentar auxiliarlo.

Sánchez tuvo que detener su emotivo discurso, para que el militar fuera atendido. En ese momento, los militares empezaron a decir “está deshidratado”, a la vez que hacían labores médicas de primeros auxilios para lograr que recuperar el conocimiento.

El ministro cerró su intervención rápidamente y una doctora llegó para socorrer al militar. En ese mismo evento, el ministro Armando Benedetti se rehusó a pronunciar un discurso ante los uniformados liberados.