Tragedias en las vías de Caldas: aumentan muertes por accidentes de tránsito pese a controles y sanciones

En el departamento de Caldas, la siniestralidad vial continúa siendo un problema crítico que enluta a diferentes municipios. En los últimos días, las autoridades reportaron cuatro fallecimientos por accidentes de tránsito, confirmando el incremento sostenido de estas tragedias durante el año en curso. Uno de los casos más impactantes corresponde a un hombre que había sufrido lesiones tan severas que los equipos médicos planeaban trasladarlo a un hospital con mayor capacidad, pero lamentablemente, no logró sobrevivir antes de que pudiera recibir atención especializada. Aunque inicialmente trascendió una versión distinta sobre el motivo del accidente, la principal hipótesis apunta a que fue víctima de un atropellamiento por parte de un conductor que posteriormente huyó del lugar.

La magnitud de la situación se evidencia en los registros acumulados: ya suman 169 víctimas fatales por accidentes de tráfico en Caldas en lo que va del presente año, cifra apenas inferior a las 171 del año pasado, pero significativamente por encima de las 152 muertes registradas en 2023, según datos oficiales citados en LA PATRIA. Este panorama coloca la problemática vial en el centro de la agenda local, mostrando además un preocupante ascenso, particularmente en municipios como La Dorada, donde el número de fallecidos pasó de 16 en 2024 a 30 en 2025. Palestina, por su parte, duplicó sus casos, pasando de 3 a 7 víctimas en el mismo periodo.

Entre los hechos recientes destaca el caso de Lucelly Gómez López, una mujer de 86 años que fue arrollada por una motocicleta cuando realizaba su habitual caminata junto a su hermana en el sector Alto del Indio, carretera entre Santágueda y Arauca, en Palestina. De acuerdo con la información recopilada por LA PATRIA, el conductor implicado en el accidente sería extranjero y no tenía los documentos requeridos para transitar.

Otra de las tragedias ocurrió en barrio Los Fundadores de Palestina, donde José Iván Cifuentes perdió la vida al ser embestido por un automóvil presuntamente conducido por personas en estado de embriaguez. El alcalde local, Álvaro Osorio, reveló que a pesar de los controles implementados —con alrededor de 170 comparendos y 40 vehículos inmovilizados en lo que va del año— los accidentes siguen sucediendo. La autoridad enfatizó que se han realizado esfuerzos como la puesta en marcha formal del cuerpo de tránsito, aunque persisten situaciones lamentables.

En una vía cercana al corregimiento de Guarinocito y La Dorada, José Demetrio Moya Arias murió instantáneamente tras colisionar su motocicleta contra un camión. En otro caso, un motociclista de 56 años sufrió heridas leves al impactar con un automóvil en la carretera de Chinchiná a Palestina; el Cuerpo de Bomberos de Chinchiná lo asistió y lo trasladó al hospital San Marcos.

Por último, el domingo por la mañana, un vehículo particular sufrió un volcamiento cerca de la polvorería Luces de Colombia. Según Carlos Alberto Castrillón, comandante del Cuerpo de Bomberos, los dos ocupantes resultaron ilesos y fueron llevados al hospital San Vicente de Paúl solo por precaución. Estos sucesos reflejan la complejidad y diversidad de factores presentes en las vías del departamento, desde imprudencia, falta de documentación hasta la embriaguez, todos señalados en los reportes de LA PATRIA como puntos críticos para la seguridad vial regional.

¿Por qué la cifra de accidentes mortales en Caldas se mantiene alta a pesar de los controles viales? La recurrencia de tragedias en las carreteras del departamento, según LA PATRIA y la alcaldía de Palestina, evidencia que las medidas de control —como los comparendos y la inmovilización de vehículos— aunque constantes, no son suficientes por sí solas para revertir la tendencia al alza. Las autoridades han identificado factores persistentes como la conducción bajo efectos del alcohol, la circulación sin la debida documentación y el desconocimiento de las normas de tránsito por parte de algunos conductores.

El análisis de la situación señala la necesidad de una estrategia más integral, donde la educación vial, el fortalecimiento de la vigilancia y la responsabilidad ciudadana sean pilares fundamentales. Las cifras comparativas entre años y municipios confirman que el reto continúa y que la seguridad vial requiere de intervenciones articuladas para prevenir nuevas víctimas y proteger la vida en las carreteras de Caldas.