Mujer aceptó tomarse cerveza en un billar y sicario la asesinó en veloz ataque

El atentado ocurrió este martes en Barranquilla luego de que dos hombres en moto dispararan contra un grupo de personas que departía en el establecimiento.

El ataque sicarial se registró sobre las ocho de la noche y quedó registrado en una cámara de seguridad del billar, ubicado en el barrio Las Malvinas.

En el video se observa cuando llega una motocicleta al sitio y de ella desciende un hombre que, apresurado y sin quitarse el casco, dispara en varias ocasiones contra las personas que departían en una mesa.

Versiones preliminares que recogió El Heraldo indican que María Helena Adarraga Castro, de 38 años de edad, fue impactada en el tórax posterior y falleció en el sitio de los hechos.

También, dice, un hombre que departía con ella, identificado como Ezequiel Enrique Mendoza Ariza, de 45 años, resultó herido por varios disparos que hicieron blanco en su humanidad.

Pese a que estas dos personas fueron auxiliadas y trasladas hasta un hospital, solo Mendoza logró sobrevivir y se encuentra bajo pronóstico reservado. El medio regional apunta que según primeras pesquisas de la Policía el ataque estaría dirigido contra el hombre.

Lo mismo cree la hermana de la víctima, Ivón Adarraga, que en diálogo con Emisora Atlántico dijo que su familiar al parecer estaba en el lugar equivocado ya que había salido de la casa a averiguar por el negocio de un patio.

“Mi hermana ya venía de regreso y uno de los que estaba en el billar la llamó. Mi hermana se acercó y le brindaron una cerveza. Ella se quedó allí cuando llegaron los sicarios repartiendo tiros y ella llevó la peor parte”, precisó Ivón en la emisora.

Pero la Policía confirmó, según los medios regionales, que la mujer presentaba cuatro anotaciones judiciales por porte de estupefacientes y porte ilegal de armas de fuego. El hombre herido también tenía una por porte ilegal de armas.

Ivón aseguró que su hermana ya había cumplido una condena en Bucaramanga por esos delitos, que se había ido a vivir a Barranquilla, que “no tenía enemigos” en ninguna de las dos ciudades y que con su muerte 8 hijos quedaron huérfanos.

La grabación es una de las pruebas que tienen las autoridades para dar con los responsables de este ataque.