Rana que importaron creyendo que era una mina de oro resultó ser un dolor de cabeza

La rana toro (Lithobates catesbeianus) es un feroz depredador que ha puesto en alerta a las autoridades de los países a donde ha llegado como especie introducida, pues su ferocidad y apetito voraz la convierte en una amenaza para muchas otras especies nativas, poniendo en riesgo el equilibrio de los ecosistemas.

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Según reportes científicos, este anfibio llegó a Colombia en 1986, cuando lo trajeron de Brasil para iniciar zoocriaderos en Caldas, que pretendían comercializar su carne, considerada en algunas partes del mundo como un plato gourmet, pero estos procesos en el país no tuvieron el resultado esperado y, por el contrario, fue una acción dañina debido a que de allí se escaparon algunos especímenes.

Gracias a sus capacidades adaptativas y su fácil reproducción, en algunos años este animal comenzó a invadir otros departamentos como Valle del Cauca, Cundinamarca, Tolima y por supuesto, el Quindío, en donde las alertas de grandes poblaciones de rana toro en humedales y lagos se comenzó a dar entre los años 2010 y 2013, hasta que hoy ya es común verla y más fácil aún, escuchar su canto en diferentes zonas húmedas del departamento.

Su riesgo para los ecosistemas está en que por su gran tamaño se alimenta de gran variedad de animales entre ellos, insectos como coleópteros o lepidópteros, arácnidos, gusanos, lombrices, caracoles, peces, lagartos, tortugas, lagartijas, roedores, otras ranas, murciélagos, serpientes e incluso aves y huevos de estas.

Características físicas de la rana toro

La rana toro alcanza un gran tamaño, sus largas patas traseras, de 25 centímetros de largo, superan en longitud al propio cuerpo, que mide alrededor de 20 centímetros de largo. Estas ranas pueden llegar a pesar más de 1 kilogramo, midiendo en total desde unos 10 o 17 hasta incluso 46 centímetros. Una rana toro salvaje puede llegar a vivir unos 10 años, mientras que en cautiverio puede alcanzar los 16.

La cabeza de las ranas toro es plana y bastante ancha, presentando un pliegue de piel en ambos lados de la cabeza, concretamente desde detrás de los ojos hasta llegar al tímpano. Es en ese tímpano donde se advierte el dimorfismo sexual en las ranas toro, pues los machos los tienen más grandes y con un borde oscuro, mientras que el diámetro es menor en las hembras, siendo del mismo tamaño que sus ojos.

Presentan manchas o motas más oscuras que el resto del cuerpo, dispersas por su torso, cabeza y extremidades. Estas extremidades terminan en unas manos y pies que tienen cuatro dedos, presentando en sus patas traseras membranas interdigitales entre todos sus dedos salvo en el cuarto.

Tortuga pímpano, depredador de la rana toro

Desde la Corporación Autónoma Regional del Quindío, informaron que en el departamento se adelanta un trabajo importante en la conservación de la tortuga pímpano, que es una especie que juega un rol importante en los ecosistemas del departamento, pero además se ha identificado que es un depredador natural de la rana toro, por lo que se convierte en un controlador natural de la población de esta especie invasora.