Policía ayudaba a víctimas de avalancha, mientras su hijo estaba entre lodo

El patrullero Weimar Pajuy prestaba servicio cuando ocurrió la emergencia en Mocoa. Fue a buscar a su esposa y su pequeño pero no los halló.

Su compañera sentimental y el niño, de 2 años, fueron arrastrados por la corriente de agua.

Sin embargo, la mujer fue auxiliada por los vecinos y una ambulancia la trasladó muy herida al hospital de la capital de Putumayo. En medio de la confusión por la avalancha, el menor se extravió.

Pajuy se enteró de la desaparición de su hijo tres horas después, contó a Noticias Caracol:

Pasando como unas 3 horas, una hermana me dijo que la mamá de mi hijo estaba herida, pero que no tenía el niño. Yo me preocupe porque si ella estaba herida y el niño en esa cantidad de lodo”.

Mientras el uniformado ayudaba a varias familias a salir de la emergencia, también comenzó la búsqueda de su hijo por cada calle por donde pasó la avalancha, indicó el noticiero.

Sin embargo, una mujer humilde que perdió todo durante la tragedia encontró al menor que estaba casi ahogado. Así lo mencionó Rosalía Rentería al informativo:

Estaba entre las piedras y el lodo. Fue algo muy impresionante porque ver a un niño metido entre el agua es muy difícil [llanto]. Lo llevamos a la casa, lo bañamos y lo acostamos a dormir”.

El patrullero le agradeció a la mujer por salvar la vida de su pequeño y la calificó como un “ángel”.