Nueve días después, termina la toma de conductores a la catedral San Pedro, en Cali

La Personería de Cali y la Arquidiócesis de Cali participaron como garantes de la firma del acta de compromisos entre trabajadores y contratista en la que se acordó que Unimetro, una de las operadoras del sistema Masivo Integrado de Occidente (MIO), pagará un mes de los salarios atrasados.

También hará los aportes correspondientes a la seguridad social, con lo cual los conductores accedieron a abandonar la catedral, ubicada en pleno centro de Cali, capital del departamento del Valle del Cauca.

El personero de Cali, Héctor Montoya, acompañó la negociación y consiguió que los conductores que hicieron parte de la protesta fueron revisados médicamente con el fin de verificar su bienestar antes de abandonar la catedral.

Por su parte, el arzobispo de Cali, monseñor Darío de Jesús Monsalve, celebró que se pudiera llegar un acuerdo e instó para que desde los sectores políticos se solucionen definitivamente los problemas de transporte en la ciudad.

El prelado hizo un llamado “a las autoridades municipales para que se busque una solución de fondo, en favor de la ciudad y la ciudadanía, de la calidad y eficiencia del servicio (público de transporte), al problema gravísimo de la movilidad en Cali”.

El sindicato de trabajadores de Unimetro aspira a conseguir prontamente el pago de los otros dos meses de salario que aún debe la empresa, así como también la concertación en temas de vacaciones y dotaciones para los empleados.

Para la iglesia y sus feligreses, también es un alivio recibir esta noticia en vísperas de la Semana Santa, cuando suele haber grandes congregaciones.

EFE