US$ 5 millones, destina Maduro para espionaje y desestabilización en Colombia

Esa información se supo por parte de algunos de los casi 700 desertores de las fuerzas armadas de ese país, que dicen que hay varios infiltrados en el país.

Dichos informantes que según un informe de El Tiempo pretendieron hacerse pasar por militares en desacato, no están diciendo la verdad sobre a qué regimiento pertenecen, denuncian quienes sí vienen huyendo del régimen de Nicolás Maduro.

El Tiempo informa que el Comando Estratégico Operacional de las Fuerzas Armadas de Venezuela, (CEOFANB) ordenó un despliegue de “redes de inteligencia exterior en territorio colombiano, para adelantar operaciones encubiertas en torno a factores militares y amenazas provenientes de Colombia y de Estados Unidos”.

Dice el informe que en la actualidad hay 50 espías de Maduro, principalmente en Bogotá y en 8 regiones del país.

Los recursos económicos mencionados tienen como fin, asegura el diario capitalino, infiltrarse en marchas y protestas, y realizar acciones contra el presidente interino de Venezuela Juan Guaidó, información que llevó al canciller colombiano a emitir un comunicado advirtiendo sobre posibles agresiones a Guaidó.

También hay evidencias de que uno de tales infiltrados asistió a un foro sobre Venezuela en el que participaron el canciller Holmes Trujillo y el embajador de EE. UU. en Colombia Kevin Whitaker.

La prueba es que el espía le tomó fotos al embajador Whitaker y de inmediato se las envió a un miembro del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional, Sebín, de Venezuela.

El informe da cuenta de que existen vínculos cercanos comprobados entre el Eln y el Sebín, y las autoridades colombianas han expulsado del país a por lo menos 10 espías de Maduro en los últimos 3 meses.

Entre otras denuncias, el artículo de El Tiempo culmina con que el objetivo de tales espías es identificar y asesinar a quienes desacaten las órdenes del dictador y vengan a Colombia en busca de refugio.

Venezuela tiene 365.315 efectivos y 1,6 millones de milicianos civiles. A pesar de que Maduro enfrenta una dura embestida, mantiene la lealtad de la cúpula militar.