Familia de Yuliana Samboní no recibió indemnización: no quiso y el Estado se durmió

La justicia le ordenó al asesino Rafael Uribe Noguera a pagar cerca de 1.600 millones de pesos por el crimen de la menor, pero ese dinero nunca se entregó.

Hay dos razones por las que eso sucedió, de acuerdo con la Agencia de Periodismo Investigativo (API). La primera es que se liquidó la constructora Lascaux SAS (que construyó el edificio donde se cometió el crimen de Yuliana Samboní), de la que Francisco Uribe Noguera, hermano mayor del homicida, era socio. La segunda es que el Estado no convocó a tiempo la audiencia pública para la indemnización de la familia.

La multa de cerca de 1.600 millones a Rafel Uribe Noguera la impuso el Tribunal Superior de Bogotá, el 2 de noviembre de 2017, cuando le aumentó la condena a 58 años. A finales de ese mes, señala API, se remitió el proceso del asesino a un juez para que se iniciara el incidente de reparación integral de la víctima, es decir, para indemnizarla económicamente.

El artículo 102 de la ley 906 de 2004, citada por API, dice que el juez que condenó al victimario tiene ocho días para convocar la audiencia de indemnización; sin embargo, esa diligencia no se hizo y el tiempo caducó.

No obstante, la defensa de los hermanos Uribe Noguera, Catalina y Francisco, que fueron señalados y absueltos (en primera instancia) de proteger al asesino de la menor, le dijeron a API que ellos le ofrecieron a la familia Samboní indemnizarlos, pero esta no aceptó.

Eso se alinea con lo que dijo Viviana Benavídez, abogada de los padres de la niña, en 2017, meses después del crimen que paralizó a todo el país.

En una entrevista con BBC Mundo, Benavídez dijo que la familia de la víctima no quería recibir dinero de los Uribe Noguera porque son de origen “indígena, y ellos consideran que si obtienen dinero sería como vender a su hija”.

Sin embargo, luego de que la noticia de API se conociera este viernes, la parte civil que lleva el caso Yuliana Samboní anunció, de acuerdo con Caracol Radio, que iniciará un proceso para buscar que los padres de la víctima reciban un dinero como parte de una reparación.

Cabe resaltar que el asesino Rafael Uribe Noguera no tenía ningún bien a su nombre, pese que tenía apartamento y carro, señala API. De igual manera, dice la agencia, los negocios de los hermanos del condenado, incluyendo la constructora liquidada, fueron a la quiebra, pues además se les señaló de cómplices.

Por ahora, queda esperar que avance el proceso para indemnizar a la familia Samboní y esperar que esta acepte.