La faceta de poeta de Belisario Betancur, su pasatiempo después del Palacio de Nariño

El Espectador hace una lista de los aportes del expresidente en diferentes campos: “Poeta, periodista, catedrático, traductor, editor”, y la lista continúa.

Dice el diario capitalino que Belisario también fue “consejero del papa Juan Pablo II en temas de justicia y paz (hay que recordar que ese papa vino a Colombia durante su administración), estadista, impulsor del Museo de los Niños, la Casa de Poesía Silva, la Editorial Tercer Mundo y de la Fundación Santillana en Colombia”.

Y el medio agrega otras obras de su hoja de vida como intelectual y poeta:

“Fue traductor del ruso Boris Pasternak (escritor de la novela ‘El doctor Zhivago’), de la escritora belga Margarite Yourcenar (Memorias de Adriano) y del griego Constantino Cavafis”, reza el artículo.

Betancur fue autor de algunos ensayos, entre los cuales se encuentran ‘La penitencia del poder’, ‘El homo sapiens se extravió en América Latina’, ‘El cristo del desarrollo’, ‘Colombia, cara a cara’, ‘Base para un gobierno nacional’, ‘El cruce de todos los caminos’, ‘El viajero sobre la tierra’, ‘El rostro anhelante’, ‘Imagen del cambio social en Colombia’, ‘A pesar de la pobreza’, ‘De la miseria a la esperanza’, ‘La ayuda externa’, ‘Desde el alma del abedul’ y ‘Despierta Colombia’.

Publicó el libro de poesía ‘Poemas del caminante’ y los cuentos ‘Agua linda’, ‘Media vuelta a la derecha’ y ‘El viajero sobre la tierra’.

Y no fueron solo obras publicadas, sino que ganó premios por ellas. Dice El Espectador que en 1993, Betancur ganó el premio Príncipe de Asturias de Cooperación Internacional y en el 2007, el Premio Internacional Menéndez Pelayo.