Se hicieron pasar por pasajeros y luego robaron hasta al conductor, en Facatativá

Nuevamente, los pasajeros de un bus intermunicipal fueron víctimas de los ladrones. En esta ocasión, los delincuentes se hicieron pasar por usuarios y luego, con armas de fuego, amenazaron a los pasajeros y al conductor. El atraco, que ocurrió en la noche del pasado 26 de agosto, en el barrio El Chicó, en Facatativá, quedó registrado en las cámaras de seguridad del vehículo.

Según los hechos registrados en video, el robo duró menos de dos minutos y, aunque muchas personas intentaron esconder sus pertenencias, los ladrones armados los amenazaron para que las entregaran, incluso uno de los pasajeros se negó y fue agredido por uno de los ladrones.

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El conductor del vehículo también fue amenazado por uno de los hombres, quien le apuntó con un arma de fuego en la cabeza y lo forzó a entregar su maletín y las ganancias del día. En medio del hurto, una pasajera se levantó de su sitio e intentó salir del vehículo, pero uno de los ladrones reaccionó con rapidez y le bloqueó la salida.

Con las imágenes obtenidas por la cámara de seguridad, las autoridades intentan dar con el paradero de los responsables, para que respondan por los delitos comentados.

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Esta no es la primera vez que un bus intermunicipal se vuelve el epicentro de un robo masivo. En marzo de este año, un grupo de hombres armados detuvieron a uno que cubría la ruta Bogotá – Facatativá y robaron las pertenencias de más de 30 pasajeros. Según le relató una víctima al ‘Ojo de la noche’, por lo menos 15 personas resultaron heridas y 10 interpusieron una denuncia ante la Policía.

Según la Secretaría de Movilidad de Cundinamarca, esta amenaza afecta a casi todos los corredores de acceso a la capital. No obstante, los más afectados por los asaltos masivos a buses intermunicipales son las rutas 40, 50 y 45, es decir, las de más tráfico: la vía al norte, al sur y al occidente del departamento.

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De acuerdo con investigaciones criminalísticas del tema, el modus operandi parece seguir el siguiente patrón: los sujetos abordan el vehículo en una zona remota, amenazan al conductor con un arma de fuego para que no pueda detener el bus, mientras otros miembros de la banda hurtan a los pasajeros.