El escritor Mauricio Navas Talero presenta su conferencia Cómo conversar con tus hijos y no morir en el intento

Medicina Legal registró 2.350 suicidios a noviembre del año 2021, afectando a 335 jóvenes entre los 20 y 24 años, siendo el rango de edad con más casos. Cada 30 horas se suicida un adolescente en Colombia.

Ante este panorama, el escritor Mauricio Navas Talero, con más de con más de 30 años dedicados a la escritura, 4 premios Simón Bolívar, 5 Indias Catalinas, 2 TV y Novelas y más 2000 libretos escritos para televisión, decidió abrir la conversación sobre cómo los padres se comunican con sus hijos.

El encuentro de tres horas busca que los asistentes cambien los errores en la forma cómo se comunican con sus hijos y que, tradicionalmente, se traducen en conflicto y distanciamientos dolorosos, a veces con consecuencias indeseables en la familia.

La comunicación, el camino más viable para concertar, sensibilizar, contar, expresar ideas y emociones, es la premisa de la conferencia.

De acuerdo con Navas Talero: “El mundo va a tal velocidad que la comunicación que se establece entre las nuevas generaciones y sus progenitores parece estar no solo contaminada sino rota”.

Mauricio Navas usará su experiencia como padre y profesional en la escritura, no solo para sensibilizar, sino también para abrir una puerta, un camino que permita y facilite ese puente de comunicación entre padres e hijos y de paso ayudar a las familias a que el diálogo con sus hijos no solo sea mejor sino sea efectivo y acertado.

“Soy sensible al gran reto que significa comunicarse con los hijos. Se dice que la dificultad aparece en la adolescencia y creo que se debe extender a toda la existencia. Tener buena comunicación con un niño de 3 años es tanto o más crucial que con la joven de 14”, expresa Mauricio Navas Talero

Los temas de la conferencia serán: El diálogo durante la infancia, qué significa escuchar, educar y conversar, las drogas, el sexo, el rendimiento escolar, las relaciones familiares, etc. Cómo abordar estos temas que tienden a volverse “bombas” en la vida hogareña por cuenta de que se ha llegado a la adolescencia.

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