Cali supera los 1000 homicidios en 2025: escalada de violencia, armas y redes criminales en aumento

La ciudad de Cali enfrenta una preocupante escalada de violencia, reflejada este 13 de diciembre con la superación de los 1000 homicidios en lo que va del año 2025. De acuerdo con el Observatorio de Seguridad de Cali, este incremento representa un aumento del 13% en comparación con el mismo periodo del año anterior, cuando se contabilizaron 882 casos. Estas cifras distan considerablemente de la meta propuesta por la administración distrital al inicio del año, que proyectaba reducir los homicidios por debajo de los 900 incidentes. En 2024, el balance final había marcado 946 muertes violentas, siendo ese el registro más bajo en las últimas tres décadas. Sin embargo, analistas advierten que al mantener la actual tendencia, la capital del Valle del Cauca podría finalizar 2025 con hasta 1040 casos de homicidios.

El clima de inseguridad se agrava con otros hechos judiciales ocurridos recientemente en la región. En el municipio de Yumbo, la Policía Nacional informó sobre la captura de un individuo de 49 años durante un allanamiento en el barrio Buenos Aires. En su poder se halló una escopeta, un revólver, más de 50 cartuchos de diversas especificaciones, tres proveedores de armas, un radio de comunicaciones y varios chalecos antibalas. La persona arrestada cuenta además con antecedentes judiciales relacionados con el tráfico de estupefacientes, situación que subraya la persistencia de actividades delictivas complejas en el área metropolitana.

Por otro lado, la Policía Nacional ejecutó un operativo contra el Grupo Delincuencial Organizado conocido como “Los Flacos”, señalado por su papel en el incremento de homicidios selectivos en municipios como Alcalá, Cartago, Ansermanuevo y Obando. En estas diligencias se logró la captura de cuatro individuos, identificados con los alias de “Pipe”, “Lancho”, “Kevin” y “Gambia”, presuntamente responsables de coordinar y perpetrar asesinatos por encargo, contribuyendo a la ola de violencia que afecta al norte del Valle.

Además, las autoridades reportaron importantes acciones encaminadas a combatir la comercialización de pólvora ilegal y licor adulterado. Como resultado de los controles realizados, se incautaron ocho cajas de pólvora y productos pirotécnicos valorados en más de diez millones de pesos, los cuales estaban siendo transportados bajo la modalidad de encomienda. Complementariamente, en la vía Cali-Andalucía, a la altura del peaje Estambul, fueron confiscadas 59 botellas de aguardiente Blanco del Valle adulterado, lo que evita potenciales riesgos para la salud pública.

Estos acontecimientos reflejan la compleja situación de seguridad que vive actualmente Cali y la región circundante. Los datos proporcionados por el Observatorio de Seguridad y la Policía Nacional evidencian una dinámica delictiva multifacética, donde el incremento de homicidios, la posesión ilegal de armas, la actuación de redes de sicariato y el comercio ilícito de productos peligrosos convergen para desafiar a las autoridades y a la comunidad. La vigilancia y los operativos continuarán desempeñando un papel esencial, mientras la ciudadanía y los entes gubernamentales buscan maneras de disminuir estos índices e impedir consecuencias más graves en la vida cotidiana de los habitantes del Valle del Cauca.

¿Qué estrategias está considerando la administración distrital para reducir los homicidios en Cali?

La pregunta acerca de las medidas que podría estar adoptando la administración distrital de Cali para enfrentar la alarmante situación de homicidios cobra relevancia ante el incremento reportado por el Observatorio de Seguridad. La preocupación social y el reto institucional que implican estas cifras exigen la revisión de las tácticas puestas en marcha y el diseño de otras más efectivas.

Explorar este interrogante permitirá conocer si existen políticas públicas concretas, fortalecimiento de la fuerza pública, iniciativas de prevención o estrategias de articulación con la comunidad que apunten a reducir los índices de muertes violentas. La respuesta será clave para comprender el rumbo que tomará la ciudad en términos de seguridad y convivencia durante el resto del año y hacia el futuro.