Problema para los que viven en el barrio Policarpa (Bogotá): dicen tener miedo por lo que pasa

La preocupación por la seguridad en el barrio Policarpa Salavarrieta, en la localidad de Antonio Nariño, ha aumentado en los últimos meses debido a la constante presencia de habitantes de calle y el incremento de la violencia en la zona. Vecinos del sector, muchos de ellos adultos mayores, aseguran sentirse desprotegidos y expuestos, al punto de modificar sus rutinas diarias para evitar riesgos.

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Según habitantes de la zona, algunos locales comerciales han optado por abrir más tarde y cerrar más temprano ante los reiterados hechos de inseguridad. Incluso, varias personas, especialmente mayores, han adoptado la costumbre de salir con palos o elementos contundentes para defenderse en caso de ser atacados.

Ante esta situación, un grupo de jóvenes residentes ha decidido tomar acciones comunitarias. De acuerdo con una investigación publicada por el periódico El Tiempo, estos ciudadanos se organizan cada mañana, desde las 6:00 a. m., para desalojar de forma pacífica a los habitantes de calle que pasan la noche o la madrugada en el espacio público del barrio.

La Secretaría Distrital de Integración Social (SDIS), en el censo hecho en octubre de 2024, identificó a 10.248 personas en condición de calle en toda Bogotá. En el barrio Policarpa, se calcula que al menos 40 de ellas están de forma permanente, aunque hay una constante circulación de personas que transitan entre este sector y el barrio San Bernardo, donde residen más de 500 habitantes de calle de manera fija.

“Hay un nivel de rotación donde llega gente nueva casi cada tercer día”, explicó Daniel Mora, subdirector para la adultez de la SDIS, a ese medio.

Aunque la presencia de habitantes de calle ha causado rechazo entre algunos vecinos, también existen personas que empatizan con su situación y les brindan apoyo. Algunos residentes les entregan comida, dinero o propinas a cambio de labores como sacar la basura, cuidar vehículos o ayudar en el tránsito. No obstante, estos ingresos, según relatan líderes comunitarios, suelen terminar en la compra de sustancias psicoactivas en San Bernardo, lo que perpetúa un ciclo de consumo y desplazamiento constante.

La violencia se transforma en el barrio Policarpa de Bogotá

Olson Zárate, presidente de la Junta de Acción Comunal del barrio Policarpa, ha denunciado el aumento de la violencia armada en el sector. Según Zárate, esta situación se ha intensificado desde el desplazamiento de habitantes de calle que antes permanecían en el desaparecido Bronx y que ahora se han asentado en San Bernardo y sus alrededores. A diferencia de años anteriores, donde los atracos se cometían con cuchillos, ahora se han identificado casos con armas de fuego, lo que eleva la peligrosidad de los delitos.

Zárate también señaló la falta de respuestas efectivas por parte del Estado para enfrentar las redes de microtráfico que disputan el territorio “a sangre y fuego”.

¿Qué acciones policiales hay en el sector?

La Policía Metropolitana de Bogotá (Mebog) ha desplegado estrategias para controlar la situación. Durante el presente año, se han hecho tomas masivas en el barrio Policarpa como parte de sus planes de contención. Según cifras oficiales, en la zona se han registrado 7 capturas  (4 en flagrancia y 3 por orden judicial), la incautación de un arma de fuego, más de 280 gramos de estupefacientes, 9 hurtos de celulares, un robo de automotor y 3 casos de violencia intrafamiliar.

A pesar de estos esfuerzos, los habitantes del barrio consideran que las intervenciones son puntuales y no atacan la raíz del problema. Exigen un plan integral que combine acciones sociales, de salud pública y justicia, con una presencia institucional permanente que les devuelva la tranquilidad.