Ambulancia dejó tirado a hombre que sufrió infarto en Bucaramanga: ni súplica le sirvió

Un grupo de personas quedó sorprendida por la actitud del conductor del vehículo de servicio médico que se negó a ayudar al hombre que estaba infartado y requería asistencia de manera urgente.

(Vea también: Tapan con una sábana el carro donde encontraron sin vida a un mecánico; cuerpo sigue ahí)

La situación ocurrió en Bucaramanga (Santander), más exactamente en la calle 48 con carrera 36. En ese punto, un ciudadano denunció que el afectado sufrió un ataque al corazón mientras se encontraba caminando.

De inmediato, varias personas se acercaron a la víctima del ataque para mientras intentar auxiliarlo. En ese momento, pasó la ambulancia por el sector y pese a que los ciudadanos, desesperados, le clamaron por ayuda, el conductor continuó su camino porque eso “no era problema” para él.

​”Nos paramos a auxiliarlo y vi una ambulancia en el semáforo y corrí a pedirle que lo auxiliara, la respuesta fue que eso no era problema de él”, dijo el ciudadano

Acto seguido, el conductor de la ambulancia aceleró para marcharse a alta velocidad, mientras que los ciudadanos, como podían, intentan brindarle los primeros auxilios al hombre que estaba tendido en plena calle.

Según comentó El Tiempo, la omisión de socorro a una persona que se encuentra en peligro, sin riesgo propio ni de tercero, por parte de personal médico es un delito en Colombia.

El artículo 131 del Código Penal colombiano establece que quien cometa esa omisión “incurrirá en prisión de treinta y dos (32) a setenta y dos (72) meses”, a la vez que el artículo 168 de la Ley 100 de 1993 establece que el sistema de urgencias debe ser prestado obligatoriamente por todas las entidades públicas o privadas que brinden servicios de salud a todas las personas.