"No más", pidió niña indígena a militares que la violaron; su respuesta fue secuestrarla

Así se conoció en el relato durante la audiencia de imputación formal a los siete soldados acusados de agredir sexualmente a la menor embera chamí de once años.

La acusación estuvo a cargo de la Procuraduría, que en la audiencia narró la manera en que los responsables planearon y ejecutaron el crimen, citó CM&.

La procuradora delegada para el caso recordó que el hecho se dio cuando la menor salió de su casa, ubicada en el corregimiento de Santa Cecilia, del municipio de Pueblo Rico, y detalló:

“Cuando se encontraba cerca de las instalaciones del pelotón Buitre II fue observada alrededor de las 6:15 de la tarde por el sargento viceprimero Juan Carlos Díaz Díaz, quien le dijo que se fuera de ese lugar. La niña pretendía regresar a su casa cuando se encontró con el soldado regular Juan Camilo Morales Poveda, quien la abordó y la llevó detrás de las instalaciones del Colegio Pio XII”.

En ese lugar, ese militar, que portaba su arma y uniforme, la “accedió sexualmente en compañía de otros soldados regulares del mismo pelotón”, detalló la funcionaria. Horas después, fue secuestrada:

“La niña fue abordada por el que vigilaba a quien le pidió que ‘ya no más’ y este le dijo que debía quedarse ‘por seguridad’ y le armó un cambuche”.

Esta diligencia hace parte del juicio disciplinario que les adelanta el Ministerio Público para sancionarlos con una inhabilidad para ejercer cargos públicos por más de 20 años, y es diferente al proceso penal a cargo de la Fiscalía, en el que los uniformados ya aceptaron cargos; aún se espera la condena que se les impondrá por la violación de la menor.