Destapan aterrador acoso contra hijo de Miguel Uribe: así se enteró la Fiscalía del riesgo

Un informe destapó el rastreo del dinero que recibió el sicario que disparó a Miguel Uribe Turbay, pero también puso en evidencia una preocupante situación sobre el hijo del bogotano atacado el pasado 7 de junio.

¿Cómo es acoso en contra del hijo de Miguel Uribe Turbay?

El hijo de Miguel Uribe Turbay fue blanco de un acoso por parte de personas que le estaban haciendo un seguimiento, revelado ante las autoridades días antes del ataque contra el precandidato presidencial.  Así lo indicó Semana en testimonios recogidos entre los allegados a él.

Lina Trujillo, secretaria privada de Uribe Turbay, indicó que desde el año pasado se le pidió apoyo a la Unidad Nacional de Protección (UNP) para mejorar los esquemas de seguridad, pero señaló que no hubo reacción frente al asunto.

Lo más aterrador salió a flote en una reunión que hubo días antes del atentado del pasado sábado 7 de junio, en la que estuvieron el alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán, y la senadora Paloma Valencia.

Allí, Trujillo contó que se le señaló a la Fiscalía que el hijo de Uribe Turbay y María Claudia Tarazona era seguido hasta su jardín infantil, en donde le “estaban tomando registros fílmicos” en la calle, temor que fue ratificado después del ataque contra el precandidato.

Sin embargo, de acuerdo con el testimonio, hubo desinterés por parte de la UNP en la protección al bogotano, a pesar de que hubo 13 solicitudes para reforzar la seguridad, en la que su familia también era blanco de acoso.

¿Cómo sigue la salud de Miguel Uribe Turbay?

Los últimos reportes médicos de la salud de Miguel Uribe Turbay, quien sufrió un atentado el pasado 7 de junio de 2025 en Bogotá, indican que su estado sigue siendo crítico pero ha mostrado una leve mejoría.

Según el séptimo parte médico emitido por la Fundación Santa Fe, fechado el viernes 13 de junio de 2025, Miguel Uribe Turbay permanece en la Unidad de Cuidados Intensivos bajo manejo multidisciplinario con monitoreo hemodinámico y neurológico continuo.

El comunicado destaca una respuesta al manejo instaurado, reflejada en una leve disminución de su presión intracraneana, y los valores de perfusión cerebral muestran una tendencia a la estabilidad. Esto indica que la inflamación en su cerebro está disminuyendo y el flujo sanguíneo hacia este órgano está más estable.

Los médicos de Miguel Uribe han señalado que, de continuar con esta evolución clínica favorable, en los próximos días se hará un nuevo control imagenológico cerebral para evaluar los cambios y revalorar las lesiones.

A pesar de estas señales esperanzadoras, su pronóstico neurológico sigue siendo reservado, lo que significa que su condición aún es delicada y su recuperación completa requerirá un proceso lento y continuo que podría extenderse hasta por 24 meses.

¿Qué pasó con Miguel Uribe Turbay?

Miguel Uribe Turbay, senador y precandidato presidencial colombiano, sufrió un atentado el pasado sábado 7 de junio de 2025 durante un mitin de campaña en el barrio Modelia, en el oeste de Bogotá.

Uribe Turbay recibió varios disparos, dos de ellos en el cráneo, lo que lo dejó gravemente herido e inconsciente. Fue trasladado de inmediato a una clínica cercana y posteriormente a la Fundación Santa Fe en el norte de Bogotá, donde fue sometido a un procedimiento quirúrgico.

Según los informes, el ataque ocurrió alrededor de las 5 de la tarde. Un joven de 15 años fue arrestado en el lugar de los hechos y se le considera el presunto autor material del ataque.

Las autoridades colombianas están investigando las hipótesis detrás del atentado, incluyendo si se trató de un ataque por lo que representa Uribe Turbay como senador opositor, a su partido político (Centro Democrático), o un intento de desestabilizar al gobierno.

El atentado conmocionó a Colombia y reavivó los recuerdos de épocas de violencia política en el país. Al día de hoy, 14 de junio de 2025, Miguel Uribe Turbay permanece en la Unidad de Cuidados Intensivos en estado crítico, aunque los últimos partes médicos indican una leve mejoría en su presión intracraneana y una tendencia a la estabilidad en los valores de perfusión cerebral. No obstante, su pronóstico neurológico sigue siendo reservado.