La ONU condena la "aparente ejecución sumaria" de dos palestinos en redada israelí en Jenin

Las imágenes difundidas por canales árabes muestran a dos hombres, con sus brazos en alto en señal de rendición, antes de recibir disparos a quemarropa de fuerzas israelíes en el norte de Cisjordania ocupada. Naciones Unidas exige una investigación "creíble" mientras denuncia la "descarada muerte" de los dos palestinos, una posible "ejecución sumaria" que genera la indignación palestina e internacional.

La Oficina de Derechos Humanos de la ONU acusó este viernes a las fuerzas de seguridad israelíes de haber realizado una “aparente ejecución sumaria” de dos palestinos en Jenin, en el norte de la Cisjordania ocupada, tras la difusión de videos en los que se observa a los hombres rindiéndose antes de ser acribillados por oficiales de la Policía de Fronteras israelí.

El incidente, ocurrido en el marco de la extendida invasión israelí en el norte de Cisjordania, reavivó las denuncias sobre el uso desproporcionado de la fuerza por parte de Israel contra palestinos.

Una ejecución filmada

Las imágenes, difundidas por Palestine TV y otros medios árabes, muestran a los dos hombres saliendo de un garaje con las manos levantadas y quitándose las camisas para demostrar que no portaban explosivos.

En un primer momento, se les ordena tumbarse en el suelo; luego, se observa en los videos, un agente los patea antes de exigirles que regresen al edificio. Segundos más tarde, y rodeados por tropas, se escuchan disparos. Los dos individuos caen desplomados. En una de las filmaciones se observa a un soldado abriendo fuego mientras los hombres yacen en el suelo.

Jeremy Laurence, portavoz de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH), calificó el episodio como otra “aparente ejecución sumaria” y expresó la “consternación” del organismo por la “descarada muerte” de los dos hombres.

También criticó con dureza los comentarios del ministro israelí de Seguridad Nacional, Itamar Ben-Gvir, quien felicitó a las fuerzas afirmando que “los terroristas deben morir”. El portavoz de ACNUDH tachó estas afirmaciones de “simplemente abominables”.

Las autoridades palestinas identificaron a los fallecidos como Al-Muntasir Abdullah, de 26 años, y Yousef Asasa, de 37. Su hermano, Mahmoud Asasa, denunció que se trató de “un acto brutal”, subrayando que los hombres estaban desarmados y se habían rendido.

La Autoridad Palestina condenó el hecho como una “atroz ejecución extrajudicial” y un crimen de guerra. Por su parte, el movimiento Yihad Islámica afirmó que uno de los dos era un comandante de la organización y el otro, un combatiente.

Un incidente “bajo revisión”

En una declaración conjunta, el ejército y la policía israelíes indicaron que los dos hombres eran “individuos buscados que habían llevado a cabo actividades terroristas, incluyendo lanzar explosivos y disparar contra las fuerzas de seguridad”. A la vez, anunciaron que el incidente está “bajo revisión” y que será remitido a las instancias pertinentes.

Sin embargo, organizaciones de derechos humanos, como la israelí B’Tselem, afirman que estos procesos rara vez derivan en sanciones significativas para los efectivos implicados. Su portavoz, Shai Parnes, subrayó que los dos hombres “no representaban ninguna amenaza” y que lo ocurrido fue “una ejecución frente a las cámaras”.

Este viernes, luego de ocho horas de interrogatorio, los tres agentes detenidos por su presunta participación en la ejecución fueron liberados, de acuerdo con la prensa israelí.

En declaraciones al portal Ynet, el abogado que representa a los tres sospechosos, Sharon Nahari, defendió que “los agentes encubiertos actuaron conforme a las instrucciones legales cuando no tenían otra opción” ya que sentían que sus vidas “corrían peligro”, una afirmación que desmienten las imágenes difundidas del hecho.

Israel extiende su invasión en el norte de Cisjordania

El tiroteo se dio en el marco de una extensa invasión militar de Israel en el norte de Cisjordania. Desde enero, las fuerzas del Estado hebreo sostienen un asedio en los campos de refugiados de Jenin, Tulkarem y Nur Shams. Como consecuencia, más de 32.000 palestinos siguen desplazados de manera forzada y los campamentos han sufrido una vasta destrucción de infraestructuras, incluyendo cientos de viviendas, negocios y vehículos.

Desde el miércoles, Israel extendió sus operaciones a la gobernación de Tubas, en el noreste de Cisjordania ocupada, alegando “intentos de establecer bastiones terroristas” en la zona. En tres días, más de 70 palestinos han resultado heridos, de acuerdo a la agencia de noticias palestina Wafa.

Además, el Club de Prisioneros Palestinos ha reportado más de un centenar de arrestos en Tubas. Muchos de los aprehendidos ya han sido liberados y varios debieron ser trasladados al hospital tras sufrir presuntos abusos o haber estado detenidos a la intemperie durante días, denunció la organización.

La violencia israelí en Cisjordania se completa con redadas casi diarias, a lo que se suma un incremento récord de los ataques de colonos armados, a menudo amparados o acompañados de soldados.

La ONU y organizaciones locales han reportado que, en los últimos dos años, se registró un aumento significativo de muertes de civiles durante las operaciones israelíes. Desde octubre de 2023, las fuerzas israelíes y los colonos han asesinado a más de 1.000 palestinos en Cisjordania ocupada, entre ellos más de 200 niños, con casi absoluta impunidad.

Leer tambiénA la sombra de Gaza, Israel asedia a Cisjordania con dos años de colonización acelerada

Mientras tanto, el episodio de Jenin revive debates internos en Israel, recordando casos anteriores como el del soldado Elor Azaria, condenado en 2017 por matar a un atacante palestino ya inmovilizado. Ese juicio dividió profundamente a la sociedad israelí y sigue siendo un punto de referencia en discusiones sobre el uso de la fuerza.

Con Reuters, EFE y AP