Asesinó a golpes a su mamá de 81 años y la prueba en su contra es un "aterrador" audio

Por este atroz suceso, la policía de la localidad de Villa Diamante, en Argentina, capturó el pasado sábado a Gilda Analía Pérez, hija de la víctima.

De acuerdo con el diario Clarín, un investigador del crimen de Nora Blanca Rodríguez dijo que ese audio, que grabó un vecino, es aterrador e incrimina a Pérez, de 49 años.

“Se escuchan los gritos, los golpes y las súplicas de la madre. Incluso la víctima le decía a su hija cada cosa que ella quería escuchar, y aún así le seguía pegando”, dijo el oficial sobre el audio a ese medio.

Los vecinos dijeron a las autoridades que los maltratos de Gilda Analía Pérez hacia su madre eran constantes, pero que nunca se detuvo porque la misma anciana no impulsaba las denuncias contra su hija, detalla el rotativo argentino.

Cuando la policía llegó al lugar de los hechos, luego de ser alertados por los vecinos, que escuchaban la brutal paliza, encontraron a la sindicada en la puerta de la casa y el cuerpo de su mamá, sin vida, desnudo y al lado de la cama, indica Clarín.

El informe de la autopsia encontró que la mujer de 81 años había sido asesinada a golpes. Tenía múltiples contusiones y traumatismos en todo el cuerpo, especialmente en la cabeza, con una fractura de cráneo, publica el mismo diario.

Los oficiales que llegaron hasta la casa de Villa Diamante capturaron a Gilda Analía Pérez, que tiene problemas de adicción, y ahora investigan si hay algún sospechoso de querer ayudarla a deshacerse del cuerpo, pues según los mismos uniformados “estaba a punto de fugarse o esperando a alguien que la viniera a ayudar para descartar el cadáver”.

“Lo sabremos cuando podamos acceder a las llamadas y mensajes de su celular”, contó a Clarín el mismo investigador que tuvo acceso al aterrador audio que aportaron los vecinos.

Mariela Bonafine, la fiscal a cargo de este atroz caso, señaló que Pérez será acusada por el delito de “homicidio agravado por el vínculo”, por el que podría pagar hasta una pena de prisión perpetua.

“En la casa no secuestramos (encontramos) estupefacientes. No descartamos que la abstinencia haya sido un factor en este homicidio. En tiempos de cuarentena como este, los adictos tienen dificultades para conseguir la droga y eso genera crisis y desbordes en el seno intrafamiliar”, finalizó una fuente policial a Clarín.