La historia de la amante de 'El Chapo' Guzmán que vivió y murió en medio del crimen

Zulema Hernández se enamoró en prisión del capo mexicano, y aunque él hizo varias cosas para conquistarla, nunca le dio un verdadero lugar en su vida y, en cambio, la usó como trofeo con otros delincuentes.

Desde que nació, Hernández estuvo muy ligada al mundo delincuencial. Eso explica que haya terminado en la misma prisión del máximo líder del cartel de Sinaloa, hoy en una cárcel de Estados Unidos. Su madre se dedicaba a la prostitución y desde muy pequeña trató de huir de la pobreza y de los maltratos en el mundo del crimen, relata Infobae.

En su adolescencia conoció las drogas, las armas y la prostitución, y por eso, en 1992, a sus 19 años, entró a prisión por primera vez. En 2000, debido al control que había conseguido en ese penal, las autoridades la trasladaron al Centro Federal de Readaptación Social, en Jalisco, el mismo lugar en el que estaba Joaquín Guzmán Loera, ‘El Chapo’.

Hernández se convirtió en una de las mujeres que asistían a las fiestas organizadas por el capo, y con el tiempo se fue relacionando con él. Según contó, a los 2 los unía el mismo miedo a la pobreza. Sin embargo, y a pesar de que Guzmán le enviaba cartas románticas que no eran de su autoría, el narcotraficante tenía muchas otras mujeres en la cárcel.

Aunque ella tuvo algunos beneficios por ser cercana a ‘El Chapo’ (que a su vez aprovechaba para controlar a través de ella el pabellón de mujeres de la cárcel), poco antes de que él se fugara, les mandaba a Hernández a otros presos para que se acostara con ellos, a modo de regalo. Eso hizo que ella enfermara de la cabeza, contó Debate en un artículo de hace unos años.

Poco después de la fuga de Guzmán, la mujer logró la libertad anticipada en 2003 gracias a un acuerdo con Estados Unidos para capturar a ‘El Chapo’. Sin embargo, fue encarcelada en 2004, acusada de narcotráfico. En 2006 logró la libertad de nuevo y 2 años después, fue asesinada. Su cuerpo fue hallado con signos de tortura en el baúl de un carro en una carretera.

Su cuerpo estaba lleno de marcas en forma de Z. Se cree que el crimen lo cometió el cartel de los Zetas, enemigo acérrimo de ‘El Chapo’. Sin embargo, hay quienes creen que, en realidad, en medio de su actividad delincuencial, junto a su hermano se robó un tráiler y eso le costó la vida. Tenía apenas 35 años.