Dos franceses detenidos desde hace tres años en Irán, acusados de espiar para Israel

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Los franceses Cécile Kohler y Jacques Paris, detenidos en Irán desde hace más de tres años, están acusados de “espionaje para el Mossad”, el servicio de inteligencia exterior israelí, de “conspiración para derrocar al régimen” y de “corrupción en tierra”, según informaron a la AFP una fuente diplomática occidental y el entorno de los detenidos.

Los franceses Cécile Kohler y Jacques Paris, detenidos en Irán desde hace más de tres años, están acusados de “espionaje para el Mossad”, el servicio de inteligencia exterior israelí, de “conspiración para derrocar al régimen” y de “corrupción en tierra”, según informaron a la AFP una fuente diplomática occidental y el entorno de los detenidos.

“Se nos ha informado de estas acusaciones”, afirmó la fuente diplomática occidental, añadiendo que eran “infundadas”. “Todo lo que sabemos es que han visto a un juez que ha confirmado estos tres cargos”, declaró la hermana de Cécile Kohler. “Se desconoce cuándo (se les notificaron estos cargos). Pero siguen sin tener acceso a abogados independientes”, añadió en una entrevista con la AFP, al día siguiente de una visita consular del encargado de negocios de la embajada de Francia en Teherán. Cada uno de estos tres cargos es punible con la pena de muerte.

Detenidos hace más de tres años, los dos franceses nunca han sido juzgados. Hasta ahora, Irán ha indicado que los dos franceses estaban acusados de espionaje, pero nunca ha revelado para qué país concretamente. Teherán aún no ha confirmado si se han presentado nuevos cargos contra ellos.

“Estos motivos de acusación, si se confirman, son totalmente infundados”, respondió una fuente diplomática francesa interrogada por la AFP. “Cécile Kohler y Jacques Paris son inocentes. No se nos ha comunicado ninguna sentencia y, según nuestra información, no se ha dictado ninguna”, añadió, instando a las autoridades iraníes a permitir que Cécile Kohler y Jacques Paris tengan acceso a sus abogados.

“No hemos dejado de exigir su liberación inmediata e incondicional desde su detención hace más de tres años”, indicó por su parte el portavoz de la cancillería francesa, añadiendo que el presidente Emmanuel Macron y el ministro de Asuntos Exteriores Jean-Noël Barrot habían “reiterado esta exigencia a sus homólogos iraníes en varias ocasiones y de nuevo en los últimos días”.

“Hace ya varios años, tres para ser exactos, que se ven amenazados por este juicio que debía celebrarse en noviembre de 2024. Hemos visto que finalmente no han sido juzgados, y mantenerlos en esta situación de incertidumbre sin poder ver una salida posible es, en sí mismo, una tortura psicológica. El hecho de saber que pueden ser condenados a muerte es, evidentemente, una presión que hoy en día afecta realmente a su salud mental y psíquica. Y, efectivamente, estamos muy preocupados por su destino”, explicó a RFI Chirinne Ardakani, abogada de Cécile Kohler.

Los dos franceses detenidos recibieron la visita de un diplomático francés

El martes 1 de julio, Jean-Noël Barrot anunció que Cécile Kohler y Jacques Paris, de quienes no se tenía noticias desde el reciente ataque israelí contra la prisión de Evin el 23 de junio, habían recibido la visita de un diplomático francés. Todos los presos de la prisión fueron trasladados a dos prisiones situadas al sur de la capital iraní.

Las familias y los abogados de la pareja exigieron el viernes 27 de junio “una prueba de vida inmediata”. “No sabemos nada del paradero de Cécile y Jacques, no sabemos si siguen vivos, no sabemos dónde están”, alertó entonces la hermana de Cécile, Noémie Kohler.

Las autoridades francesas habían indicado la semana anterior que tenían “la seguridad” de que los dos franceses no habían resultado heridos en el ataque israelí. Pero “esta información proviene de las autoridades iraníes”, lo que “no es ninguna garantía”, había declarado Noémie Kohler, cuyo último contacto telefónico con su hermana se remonta al 28 de mayo.

Cécile Kohler, profesora de literatura de 40 años originaria del este de Francia, y su compañero Jacques Paris, de 72 años, fueron detenidos el 7 de mayo de 2022, el último día de un viaje turístico a Irán.

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