Elimina los ácaros de tu cama, almohada y cobijas con este truco de vapor

Los ácaros comúnmente se encuentran en cualquier tipo de tejidos, pero dentro de casa suelen resguardars en lugares como la cama, los colchones, las almohadas y, en general, la ropa de cama; sin embargo, deshacerte de ellos ya no será más un problema siguiendo este truco de vapor. 

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Esos pequeños animalitos que miden medio milímetro se alimentan de las células muertas de la piel, y por eso se pueden encontrar en la cama, ya que es por la noche que desprendemos la piel muerta diariamente, pero es importante considerar que su presencia puede tener consecuencias en la salud. 

Existen tres problemas de salud que pueden desencadenarse por la presencia de ácaros en la ropa de cama, almohadas y el colchón: el primero es alergia a las partículas que excretan los ácaros, lo que puede causar estornudos, congestión y tos; el segundo es el asma, y si ya se padece puede empeorar los síntomas; y en tercero está la irritación cutánea resultado de la exposición a los desechos de los ácaros.

Así puedes eliminar los ácaros con vapor

Hay dos formas distintas de usar el vapor para acabar con los ácaros en el colchón, la almohada y las cobijas, y una de ellas es usar un limpiador de vapor que tenga la función de aspiración. El procedimiento consiste en seleccionar la opción de limpieza higienizante para luego pasar la máquina sobre el colchón, para así eliminar tanto el polvo como a los ácaros.

Para la segunda opción sólo necesitarás contar con bicarbonato de sodio y tu aspiradora. Lo que tienes que hacer es poner bicarbonato sobre el colchón y dejar que repose durante al menos dos horas; posteriormente se debe usar la aspiradora con función de vapor o una tradicional para eliminar los residuos y ácaros. 

Es importante tomar en cuenta que después de haber eliminado los ácaros, se debe prevenir que regresen en algún momento, y para eso se pueden hacer varias cosas, empezando por no tender la cama inmediatamente al levantarse, sino dejar que el colchón respire para que cualquier rastro de humedad se evapore, ya que ésta también promueve la aparición de estos seres microscópicos.

También se recomienda cambiar las sábanas semanalmente para reducir la acumulación de células de piel muerta (de las cuáles se alimentan los ácaros);  también lavar las fundas y cubrecolchones con frecuencia a altas temperaturas para evitar la aparición de ácaros; y, si es posible, tener un colchón desenfundable para facilitar la limpieza y la eliminación de los ácaros a futuro.