Francia condena al terrorista ‘Carlos’ a cadena perpetua

El delincuente internacional de origen venezolano, también conocido como ‘el Chacal’, recibió esa pena por un atentado en 1974 en París.

A Ilich Ramírez Sánchez, verdadero nombre de alias ‘Carlos’, el Tribunal de lo Criminal de París lo halló culpable del acto terrorista en la capital francesa en el que murieron dos personas y otras 34 resultaron heridas.

Ese Tribunal comunicó esta tercera condena a cadena perpetua para ‘Carlos’ —que tiene 67 años y está encarcelado en Francia desde agosto de 1994— tras algo menos de cuatro horas de deliberación.

Se trata de la pena máxima que prevé la ley francesa y corresponde a la solicitud de la fiscalía que consideró que “todos los elementos reunidos durante la investigación convergen hacia él”.

El presidente del tribunal, François Sottet, explicó que, al cabo de este proceso que se inició el pasado 13 de marzo, el tribunal considera probado que el venezolano —el único que se sentaba en el banquillo— fue responsable de los cuatro delitos por los que estaba inculpado.

El principal cargo es el asesinato de François Benzo y David Grunberg a causa de una granada lanzada en una galería comercial del bulevar Saint Germain de París el 15 de septiembre de 1974.

También se le consideró culpable de las heridas causadas a una treintena de personas que también se encontraban en el Drugstore Publicis en ese momento, de los daños materiales y de la tenencia y el transporte de la granada, que había sido robado a las fuerzas estadounidenses estacionadas entonces en Europa.

Antes de que el tribunal se retirara a deliberar, Ramírez Sánchez había denunciado que el proceso ha sido “absurdo” por haberse celebrado casi 43 años después de los hechos y, sobre todo porque no se le hubiera permitido una confrontación cara a cara con los principales testigos.

En esa misma línea se pronunciaron tras la lectura de la sentencia sus abogados, que anunciaron la presentación de un recurso para que se organice un nuevo juicio en apelación.

El terrorista venezolano, encarcelado en Francia desde agosto de 1994, cuando fue capturado en Sudán en una operación de los servicios secretos, ya había recibido dos sentencias de cadena perpetua.

La primera en 1997, por haber asesinado en París a dos agentes secretos franceses y a un confidente el 27 de junio de 1975.

La segunda, confirmada en apelación en junio de 2013, por cuatro atentados cometidos en Francia en 1982 y 1983, en los que murieron once personas y cerca de 200 resultaron heridas.