Campesinos en La Guajira piden ayuda urgente del Minagricultura; perderían mucha cosecha

Los agricultores de Carraipía, ubicada en Maicao, La Guajira, se encuentran en una situación crítica debido a la pérdida masiva de cosechas de ahuyama, sumergiendo a los agricultores en una crisis económica sin precedentes.

Debido a la falta de comercialización, ha llevado a la desesperación a los cultivadores locales, quienes han solicitado la intervención inmediata del Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural para encontrar soluciones y evitar mayores pérdidas.

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La senadora Martha Peralta se ha hecho eco de la urgente situación a través de sus redes sociales, llamando al gobierno a actuar de manera pronta para socorrer a la comunidad agrícola.

En su cuenta personal de X, la senadora expresó su preocupación y solicitó el apoyo institucional para los agricultores que están a punto de perder 470 toneladas de ahuyama, fruto de meses de arduo trabajo y dedicación.

Urgente este llamado de la comunidad de Maicao en La Guajira al Presidente @petrogustavo.

Mientras hay muchos niños con hambre, 470 toneladas de Ahuyama están a punto de perderse porque no ha sido posible su comercialización.

Pedimos el apoyo institucional para ayudar al… pic.twitter.com/6yCvVIznIh

— Martha Peralta Epieyú (@marthaperaltae) January 29, 2024

Esta crisis se ha venido gestando durante más de siete días, exacerbada por la dificultad para transportar productos como ñame, yuca, plátano y papoche. La imposibilidad de llevar los productos al mercado pone en riesgo la inversión de muchos agricultores locales, quienes se ven obligados a buscar alternativas para evitar pérdidas económicas.

Algunos han optado por alimentar a sus vacas con papoche, una medida desesperada ante la falta de opciones viables en el mercado. Esta no es la primera vez que la zona rural de Montería (donde murió abuela que salvó a nietas de incendio) enfrenta problemas de represamiento de ahuyama en los últimos cuatro años.

La situación ha llevado a que, en la plaza de mercado, el producto se encarezca y escasee, afectando tanto a los productores como a los consumidores.

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El año pasado, circunstancias similares llevaron a la quiebra a 457 familias productoras de papaya en Valencia y Tierralta, municipios PDET, que se vieron obligadas a sepultar miles de papayas dañadas debido al bajo precio en el mercado.

Ante esta situación crítica, los agricultores de Carraipía instan al Minagricultura a implementar medidas inmediatas para evitar la pérdida total de sus cosechas y asegurar el sustento económico de la comunidad agrícola.

La colaboración entre el gobierno, legisladores y agricultores se presenta como clave para superar este desafío y garantizar la estabilidad de la producción agrícola en la región.