Malas noticias para quienes quieren comprar carro en Colombia: será todo un camello

El sueño de muchos colombianos de comprar carro nuevo se podría alargar más de lo esperado. La crisis logística mundial, que afectó la distribución de suministros, está cerca de cumplir un año y no se ve una luz al final del túnel

Así lo evidencian sondeos y análisis hechos por expertos que dan cuenta de que los tiempos de entrega de carro nuevo en Colombia están superando los 14 meses y las principales marcas, de lujo y otras gamas, están avisándoles a sus clientes para que tengan paciencia porque el anhelo de estrenar carro está cada vez más distante.

Según una consulta hecha por el diario La República, los tiempos de entrega para algunas de las marcas más famosas en Colombia están así:

• Renault: 51 días.
• Chevrolet: entre 1 y 3 meses de entrega.
• Toyota: entre 8 y 14 meses.
• Suzuki, Citroen y DS: entre 1 y 3 meses.
• Volskwagen: entre 1 y 3 meses.

Carros en Colombia: tiempos de entrega y repuestos

De acuerdo con El Tiempo, la disponibilidad de chips y semiconductores podría mejorar en 2023, pero hay una alta probabilidad de que los problemas por logística se mantengan en 2024, todo dependerá de qué tanto se estabilice el impacto del Covid-19 en varios países.

(Vea también: ¿Mito o realidad? Explican si sirve de algo inclinar el carro para tanquear gasolina)

Sumado a esto, se espera que la crisis de contenedores comience a mitigarse y el transporte internacional de mercancías pueda retomar el rumbo en los próximos dos años, agrega es diario.

Mientras esto ocurre, los dueños de usados siguen con entusiasmo en Colombia, entre otras cosas, porque han visto como el precio de sus carros se han valorizado en valores que van entre el 20 y 30 %.

Desde el año pasado, por ejemplo, se registran subidas en esos carros han subido de precio por cuenta de una crisis logística que está cerca de poner en crisis a una industria que, además del tema logístico, se ve sacudida por las medidas como la pronta subida del precio de la gasolina y el pico y placa en ciudades como Bogotá.