¿Cuándo cambiar las llantas de una moto? Dan claves para no gastar dinero de más

Las llantas son el punto de apoyo principal de su moto, cuando se desgastan pierden agarre, especialmente en épocas de lluvia, ya que se alarga la distancia de frenado, la moto derrapa más y corre el riesgo de patinar y caerse. Por tanto, resulta vital cambiarlas a tiempo.

No todos los neumáticos se desgastan de igual manera, dependerá del modelo de la moto, el uso que le dé y el tipo de vía en la que la use. Sin embargo, hay unas normas generales para hacer un cambio oportuno de las llantas y evitar gastar dinero en reparaciones por daños que se puedan ocasionar en el vehículo.

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¿Cuándo cambiar las llantas de una moto?

1. Pinchazos

Las llantas son duraderas y están diseñadas para soportar una cantidad determinada de impactos, pero a veces se pinchan. Si esto ocurre, un mecánico debe inspeccionar la llanta para confirmar si la cámara interior no ha sufrido daños irreparables.

2. La banda de rodadura ha alcanzado el límite de desgaste

Cuando se pueden encontrar unos resaltos pequeños en la parte inferior de los surcos principales. Una vez que el resto del caucho alcanza este nivel, la llanta ha llegado al límite legal de desgaste de 1 mm. Michelin recomienda cambiar sus llantas antes de llegar a este punto. Luego de rebasar este punto, no se puede garantizar su seguridad, ni el agarre ni el rendimiento de la llanta. 

3. Las llantas muestran señales de envejecimiento

Es difícil predecir la vida útil de una llanta, pues no guarda relación con la fecha de fabricación. Las llantas que nunca se han usado o que tienen poco uso pueden presentar señales de envejecimiento.

Realice la prueba de los 5 años, antes de que sea demasiado tarde. Después de 5 años de uso, un mecánico profesional debe examinar las llantas cada año. Si es necesario cambiarlas, siga las recomendaciones del fabricante respecto al cambio de partes originales. Como medida de precaución, todas las llantas se deben reemplazar al cabo de diez años, aunque parezcan estar en buenas condiciones y no se haya alcanzado el indicador de desgaste.

4. La llanta está dañada

El pavimento, los huecos o los objetos contundentes pueden provocar daños graves en las llantas. Un mecánico debe revisar con atención todos los desgarros, cortes o deformaciones, pues solo él puede confirmar si la llanta se puede reparar.

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5. La llanta presenta un desgaste disparejo

Un desgaste disparejo de las bandas de rodadura es a menudo una señal de un problema mecánico (desgaste de amortiguadores, transmisión, accesorios, etc) o de balanceo. También puede deberse a una presión incorrecta de las llantas. 

Para evitar que esto ocurra, revise el balanceo de las ruedas cada seis meses. Así prolongará la vida útil de las llantas y conducirá con mayor comodidad.

6. Las llantas no son las correctas para el vehículo

Elija sus llantas de acuerdo con los requisitos legales y el tipo de llanta recomendado para su vehículo. Para lograr un desempeño óptimo, utilice llantas delanteras y traseras con el mismo patrón de banda de rodadura. Las llantas con diferentes diseños y patrones de desgaste pueden afectar el balanceo y la estabilidad del vehículo.