En Blu Radio se armó un debate por cuenta del restaurante ubicado en el sur de Bogotá que ofrece paloma dentro de su menú. Allí se vende paloma asada, alas de paloma y demás preparaciones controversiales.
Uno de los que alentó la curiosidad por probar comidas diferentes fue el periodista deportivo que narró cómo terminó comiendo alacrán en una calle de Beijing.
“En Beijing hay un bulevar angostico. Allá estuvimos para los mundiales de atletismo, y de la organización nos invitaron a comer a la calle más exótica”, detalló Orrego en esa emisora.
Posteriormente, Orrego reveló qué fue lo que probó estando allá. “Me comí un alacrán. Me atreví a comer un alacrán“, detalló el periodista.
La mayoría de sus compañeros no lo apoyó y tampoco vio con buenos ojos que existan restaurantes que venden paloma para comer.
Sin embargo, Néstor Morales y Alberto Linero sí estuvieron de acuerdo con probar gastronomía diferente a la habitual. De hecho, el padre contó que ha comido iguana, un plato muy común en algunas zonas de la Costa colombiana.
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Restaurante vende paloma en Bogotá… y precios no son tan baratos
El ‘youtuber’ Profeturo fue hasta el restaurante Las tres palomas, en el sur de la ciudad, para comprobar cómo es el asado del plumífero y cómo lo venden en diferentes presentaciones, acompañado incluso por pasta.
Y no es tan barato como parece. Los precios van desde 18.000 pesos y también se pueden encontrar hamburguesas o un buen sancocho de paloma.
El ‘youtuber’ visitó el sitio junto a su pareja e hizo una reseña. La paloma asada, que se ve como un pollo más pequeño por la poca carne que tiene, queda tostada como chicharrón, según los comensales.
El restaurante es de origen peruano y lleva siete meses de inaugurado. Sus meseros dicen que el sitio ha tenido muy buena acogida, ya sea por morbo o porque los productos resultan diferentes y atractivos.
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