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La comunidad aún se estremece por la trágica pérdida del joven paramédico, quien perdió la vida en un fatídico incidente mientras cumplía con su deber en la avenida Guayacanes, Bogotá. Han transcurrido más de cuatro días desde aquel fatal suceso, y las autoridades continúan desentrañando los detalles de lo ocurrido.
(En contexto: ¡Impactante! Paramédico murió tras ser arrollado cuando atendía un accidente de tránsito)
Según informó El Tiempo se trata de Michael Andrés Bogotá, un joven de tan solo 21 años, quien se encontraba prestando auxilio en la escena de un accidente de tránsito cuando fue arrollado por un furgón. Sus seres queridos, compañeros y amigos están desconsolados por lo ocurrido, pues Michael solo estaba realizando su trabajo, un trabajo que tomó con seriedad y dedicación.
“Íbamos los dos tripulando en la ambulancia, alrededor de las 2 de la mañana. Nos encontramos con otra ambulancia que se le impactó una moto por detrás”, compartió Stiven Rojas, compañero del joven, en una entrevista con CityTV.
El medio ya citado líneas arriba conoció que Michael, nacido el 11 de diciembre de 2001, estaba cursando el tercer semestre de Ingeniería Mecánica en la Universidad Santo Tomás. Hacía apenas tres meses, había decidido tomar un curso para convertirse en paramédico, buscando una forma de combinar su pasión por ayudar a los demás con su amor por las motocicletas.
(Vea también: Motociclista perdió la vida en trágico accidente de tránsito; trató de esquivar un árbol)
Sus familiares, consternados por la pérdida, exigen justicia para Michael. El presunto responsable del trágico accidente, según relatos compartidos en redes sociales, se mostró indiferente ante el suceso e incluso llegó a expresar comentarios insensibles. “Eso era para que aprendan, nadie es inmortal”, habría comentado el conductor del vehículo que arrolló a Michael.
En medio del dolor y la indignación, la comunidad clama por que se haga justicia y que el responsable afronte las consecuencias de sus acciones. Para quienes conocieron a Michael, su partida deja un vacío irremplazable, pero su legado de dedicación y altruismo perdurará en la memoria de quienes lo conocieron.
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