La Sala Clementina del Palacio Apostólico en la Ciudad del Vaticano fue testigo este jueves de una convergencia de mentes y aspiraciones, en una audiencia en la que el papa Francisco se reunió con varios empresarios y emprendedores latinoamericanos.
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Estuvieron entre ellos los colombianos David Vélez, fundador y CEO de Nubank; Jaime Gilinksi, presidente del Grupo Gilinski; Mauricio Hoyos, cofundador de la firma Tvalley, Sebastián Mejía, cofundador y presidente de Rappi, y Joaquín Losada, presidente de Fanalca, conoció Forbes.
Ellos fueron parte de la delegación de empresarios de 19 países de América Latina y el Caribe que hacen parte del Consejo Empresarial de América Latina, a quienes el papa Francisco les pidió que huyan “del beneficio a toda costa”, puesto hace que se degrade o esclavice a los trabajadores.
El encuentro se dio para abordar temas sociales como el trabajo, las migraciones, el cambio climático y el desarrollo humano integral.
“He constatado en este tiempo que esas mismas inquietudes que ustedes se plantean también están presentes en otros puntos del planeta, y por eso el intercambio nos puede ayudar a unir fuerzas para afrontar juntos problemas que en estos momentos son comunes a toda la familia humana”, expresó el el pontífice durante la audiencia.
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El papa Francisco catalogó como “imprescindible” enfocar esa labor desde una cultura del encuentro.
“La cultura del encuentro, por el contrario, expresa la búsqueda del bien común, contribuyendo así a disipar esas sombras”, anotó el papa.
Y complementó que “los esfuerzos y sacrificios cotidianos que sus empresas realizan para salir adelante, para lograr capacitar y actualizar a los trabajadores, para evitar conflictos y no llegar al dolor del despido, conscientes también de que detrás de cada trabajador hay una familia, y la entera sociedad”.
“El servicio que realizan no es abstracto, sino a cada persona y a cada pueblo, y por eso es necesario actuar juntos, sin pasar por encima de nadie y sin dejar a nadie atrás”, añadió el pontífice.
Forbes dialogó con Mauricio Hoyos, uno de los participantes en la audiencia, quien contó su experiencia durante el encuentro con el papa Francisco.
“El papa nos invitó a que construyeramos negocios basados en una cultura de encuentro, en donde se tejan redes que permitan la colaboración de todos salir adelante sin atropellar a nadie y sin dejar a nadie atrás”, indicó a Forbes el fundador de TValley Mauricio Hoyos.
“También nos dijo que nosotros los emprendedores somos unos tejedores de esperanza, porque al final del día la esperanza basada en el trabajo nos permite tener un mejor mañana y es muy importante que continuemos con esta tarea teniendo un propósito y generando un impacto positivo en la sociedad. Recalcó que tenemos que hacer una mirada hacia nuestros negocios y encontrar cómo construir esas redes, como los pescadores que tenían que construirlas para salir a pescar”.
Hoyos mencionó que entre empresarios y emprendedores conversaron sobre la necesidad de trabajar en conjunto para impactar de una forma más eficiente en América Latina a través de la generación de empleo de calidad, de mejores prácticas y de encontrar esos puntos de encuentro para ayudar a los demás para construir un mejor mañana.
“Muy enfocados en cómo construir un mejor tejido social partiendo de la base que el desarrollo económico sea ese gran motor para una sociedad más equitativa y más sólida hacia el futuro, así como el rol de los países en América Latina juntandonos podemos realmente generar un impacto más positivo para la región”, añadió Hoyos.
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