Quiere decir que no se aceptó la idea que había manifestado el presidente Jorge Perdomo de no hacer cuartos de final, sino que después de la fase ‘todos contra todos’ se hicieran las semifinales para agilizar el calendario.

Según Perdomo, se tomó la decisión de eliminar la fecha de clásicos porque “beneficia solamente a 3 plazas: Medellín, Cali y Bogotá, en tanto que la posibilidad de que clasificaran 4 a las finales y no 8, estaría beneficiando un mayor número de clubes”.

En consecuencia, se determinó que en los torneos de ambos semestres seguirán avanzando los 8 mejores equipos, que a través de ‘playoffs’ se eliminarán desde los cuartos de final hasta llegar al campeón. El primer campeonato iniciará el fin de semana del 5 de febrero de 2018 y terminará el 3 de junio.

El artículo continúa abajo

El anuncio se contradice con la ‘recomendación’ obligatoria de Fifa plasmada desde enero en la página de la Real Federación Española, según la cual todas las ligas del mundo (exceptuando la Champions League) deben finalizar a más tardar el 20 de mayo del año mundialista, y donde se explica que el ente rector del fútbol mundial es el único autorizado para otorgar excepciones.

A su vez, el 28 de mayo está establecido como fecha obligatoria para el inicio de la concentración de las selecciones participantes de Rusia 2018, lo que también impediría que los jugadores de la Liga Águila que hagan parte de la Selección Colombia puedan disputar las finales en caso de avanzar a ellas.

Por otro lado, Perdomo destacó que los clubes facultaron a la Dimayor para modificar fechas de partidos por la participación de equipos en torneos internacionales y que se reducirán para estos la plantilla de jugadores, de 30 a 25 elementos, con el fin de que haya igualdad respecto a los clubes que no juegan a nivel continental.

Al contrario, el Torneo Águila de segunda división y la Copa Águila sí sufrieron grandes cambios. La B tendrá un solo torneo anual que finalizará con cuadrangulares, cuyos ganadores se medirán por el ascenso. El perdedor se medirá en repechaje al mejor de la reclasificación, o al que le siga, en caso de que ese ya esté clasificado.

La Copa, por su parte, eliminará en primera instancia a los equipos de la B, de la que saldrán 4 finalistas y se medirán a los equipos de la A que no están clasificados a los torneos internacionales. Los ganadores enfrentarán más adelante a los clubes que representaron al país en el exterior. Perdomo considera que así se disminuirá una carga significativa de partidos.

Se mantiene de igual forma la Superliga, la cual iniciará a finales de enero y entregará un incentivo económico de 750 millones de pesos entre campeón y subcampeón.

Esta fue la rueda de prensa de Jorge Perdomo transmitida por Win Sports: