Evangelio para hoy miércoles: Dios le envía una enseñanza sobre la avaricia

El término evangelio tiene raíces en el griego antiguo y significa “buena noticia” o “buen mensaje”. En el contexto religioso se refiere a los relatos escritos que se encuentran en el Nuevo Testamento de la Biblia, específicamente los cuatro Evangelios: Mateo, Marcos, Lucas y Juan.

Estos pasajes relatan la vida, enseñanzas, milagros, muerte y resurrección de Jesucristo desde diferentes perspectivas. Son considerados fundamentales, ya que presentan la base de la fe cristiana, sirviendo como la principal fuente de conocimiento sobre Jesús.

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Los evangelios no solo son relatos históricos, sino que también transmiten enseñanzas espirituales, éticas y morales. En ellos se encuentra la guía para una vida basada en los principios cristianos como el amor, la compasión, fe y esperanza.

Evangelio del día miércoles – Lucas, capítulo 12, versículos 13-21:

• Le dijo uno de la multitud: maestro, di a mi hermano que parta conmigo la herencia.
• Mas él le dijo: hombre, ¿Quién me ha puesto sobre vosotros como juez o partidor?
• Y les dijo: mirad, y guardaos de toda avaricia; porque la vida del hombre no consiste en la abundancia de los bienes que posee.
• También les refirió una parábola, diciendo: La heredad de un hombre rico había producido mucho.
• Y él pensaba dentro de sí, diciendo: ¿Qué haré, porque no tengo dónde guardar mis frutos?
• Y dijo, esto haré: derribaré mis graneros, y los edificaré mayores, y allí guardaré todos mis frutos y mis bienes;
• y diré a mi alma: alma, muchos bienes tienes guardados para muchos años; repósate, come, bebe, regocíjate.
• Pero Dios le dijo: necio, esta noche vienen a pedirte tu alma; y lo que has provisto, ¿de quién será?
• Así es el que hace para sí tesoro, y no es rico para con Dios.”

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Reflexión del día miércoles – Lucas, capítulo 12, versículos 13-21

Este pasaje critica la avaricia y la dependencia excesiva en la riqueza. Una parábola muestra a un hombre rico que, obsesionado por acumular bienes, planea construir graneros más grandes. Sin embargo, se le advierte que su vida no está asegurada y que su enfoque en la riqueza lo hace “rico para sí mismo”, pero no ante Dios. Destaca la fragilidad de la vida y la insensatez de priorizar posesiones materiales sobre valores espirituales. Enseña la importancia de una perspectiva equilibrada hacia el dinero, instando a buscar riquezas espirituales más allá de la acumulación material.

Enfatiza que la vida no se mide por la cantidad de posesiones materiales, mostrando a través de una parábola el peligro de acumular riquezas sin considerar la importancia de la espiritualidad y la relación con Dios.

*Este artículo fue escrito y curado por periodistas del equipo de Robby Bienestar, con apoyo de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto.