Los salmos son una colección de 150 himnos, oraciones y poemas que tienen como objetivo principal la adoración a Dios, expresión de la fe, búsqueda de consuelo, orientación espiritual y la reflexión sobre la relación entre la humanidad y lo divino.

Los salmos abordan una amplia gama de temas relacionados con Dios, Jesús y más, que traen consigo desde alabanzas y agradecimientos hasta lamentos y súplicas, brindando a los creyentes un recurso espiritual fundamental para la conexión con lo divino, la expresión de sus emociones y experiencias en la vida.

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Salmos para ganarse la lotería

El salmo 146 y 57 son de gran ayuda para ser el feliz ganador de la lotería, eso sí, debe rezar a diario con la idea de que la suerte, Dios y Jesús están de su lado.

• Salmo 146: “Alaba, oh alma mía a Jehová. Alabaré a Jehová en mi vida; cantaré salmos a mi Dios mientras viva. No confiéis en los príncipes, ni en hijo de hombre, porque no hay en él salvación. Pues sale su aliento, y vuelve a la tierra; en ese mismo día perecen sus pensamientos. Bienaventurado aquel cuyo ayudador es el Dios de Jacob, cuya esperanza está en Jehová su Dios; el cual hizo los cielos y la tierra, el mar, y todo lo que en ellos hay; que guarda verdad para siempre, que hace justicia a los agraviados, que da pan a los hambrientos. Jehová liberta a los cautivos; Jehová abre los ojos a los ciegos; Jehová levanta a los caídos; Jehová ama a los justos. Jehová guarda a los extranjeros; al huérfano y a la viuda sostiene, y el camino de los impíos trastorna. Reinará Jehová para siempre; Tu Dios, de generación en generación. Aleluya”.

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• Salmo 57: “Ten misericordia de mí, oh Dios, ten misericordia de mí; porque en ti ha confiado mi alma, y en la sombra de tus alas me amparare hasta que pasen los quebrantos. Clamaré al Dios Altísimo, al Dios que me beneficia. Él enviará desde los cielos, y me salvará de la infamia del que me devora; Dios enviará su misericordia y su verdad. Está mi vida entre leones; doy voces entre hijos de hombres que exhalan llamas; sus dientes son lanzas y saetas, y su lengua espada aguda. Exáltate sobre los cielos, oh Dios; Sobre toda la tierra sea tu gloria. Han preparado a mis pies; asemejaba mi alma, está abatido. Han cavado hoyo delante de mí; en medio de él cayeron ellos mismos. Firme está mi corazón, oh Dios, mi corazón está firme; cantaré, y trovaré salmos. Despierta, alma mía; despierta, salterio y arpa; me levantaré mañana. Te alabaré, oh Señor, entre los pueblos; a ti cantaré salmos entre las naciones. Porque grande es hasta los cielos tu misericordia, y hasta las nubes tu verdad. Exáltate sobre los cielos, oh Dios; sobre toda la tierra sea tu gloria.”

*Este artículo fue escrito y curado por el equipo de Robby Bienestar con apoyo de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano.