Así se ve hoy ‘Cirilo’, el niño de la telenovela ‘Carrusel’ a 33 años de su estreno

Carrusel fue, sin lugar a dudas, una de las telenovelas infantiles más reconocidas de la televisión mexicana cuando llegó a transmitirse por el año 1989, Uno de los protagonistas principales, Cirilo, interpretado por el actor Pedro Vivero, claro que ha crecido y ya no es aquel niño con el afro como peina, vamos a ver que ha sido de él a 33 años del estreno de la novela.

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Algunos de los personajes más recordados de Carrusel incluyen a María Joaquina, Cirilo, Laura, Daniel, Carmen, Kokimoto, y la carismática maestra Ximena. María Joaquina y Cirilo, por ejemplo, representaban una historia de amor infantil que cautivó a la audiencia.

Luego del último episodio de la telenovela, Pedro se dedicó un poco más a la actuación e incursionó en algunas obras de teatro donde demostró su talento, continuó su ámbito profesional graduándose de la carrera de Ciencias de la Comunicación por parte de la Universidad Nacional de México y actualmente se dedica a algo completamente alejado de las cámaras y reflectores; Pedro se dedica a los trabajos de construcción y ello lo comparte con algunas fotografías en sus redes sociales.

¿De qué trataba Carrusel?

La trama de Carrusel gira en torno a un grupo de niños de primaria en una escuela llamada ‘El Carrusel’ y sus relaciones con sus maestros y compañeros. Cada episodio se centraba en las aventuras, desafíos y travesuras de estos niños, y abordaba temas como la amistad, el amor, la diversidad y la importancia de la educación. La telenovela logró conectar de manera efectiva con el público infantil y también con adultos, ya que tocaba temas universales y tenía personajes entrañables.

La historia de Cirilo gira en torno a su amor no correspondido por María Joaquina, quien era interpretada por la icónica, Ludwika Paleta, una de las niñas más populares y adineradas de la escuela. Cirilo es de ascendencia afrodescendiente, mientras que María Joaquina es de origen europeo y pertenece a una familia adinerada. Debido a estas diferencias sociales y raciales, María Joaquina muestra inicialmente prejuicio y rechazo hacia Cirilo.

A lo largo de la trama, Cirilo hace todo lo posible para ganarse el cariño de María Joaquina, aunque ella a menudo lo trata con desprecio y burla debido a su origen. A pesar de esto, Cirilo continúa siendo amable y muestra una gran determinación.