Revelan nueva estafa con criptomonedas: afamada empresa será llevada ante la justicia

La fiscalía general de Nueva York acusó a las plataformas de intercambio de criptomonedas Gemini y Genesis Global, además de la empresa matriz de esta última, Digital Currency Group, de defraudar unos 1.000 millones de dólares a miles de inversores.

La demanda se centra en torno a un programa de inversiones llamado Gemini Earn, para el que Gemini se alió con Genesis y lo ofreció como una opción de bajo riesgo a pese a tener análisis internos que mostraban riesgos en las cuentas de Genesis vinculados a la malograda plataforma FTX.

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“Gemini sabía que los préstamos de Genesis estaban insuficientemente garantizados y que en un momento dado estaban muy concentrados en una sola entidad, Alameda, de Sam Bankman-Fried (fundador de FTX), pero no reveló esta información a los inversores”, indica un comunicado.

La fiscal, Letitia James, indicó que Gemini “ocultó los riesgos de invertir con Genesis, y Genesis mintió al público sobre sus pérdidas“, lo que supone fraude y un ejemplo de cómo “malos actores” causan daño al público gracias a “una industria de las criptomonedas que está infrarregulada”.

La autoridad concluyó tras una investigación que las empresas acusadas perdieron más de 1.000 millones de dólares que afectaron a 230.000 inversores y señala como ejemplo a dos inversores tempranos, de 73 y 56 años, que invirtieron todos sus ahorros en el programa y los han perdido.

La demanda, de carácter civil, que incluye a los ejecutivos de Genesis y su matriz, reclama la restitución de ese dinero a los inversores y el veto a las empresas en el sector financiero del estado de Nueva York.

Empresa de criptomonedas es propiedad de dos hermanos

Gemini es una conocida plataforma del sector de las divisas digitales dirigida por los hermanos Cameron y Tyler Winlklevoss, que se disputaron con Mark Zuckerberg la idea original de Facebook y son considerados los primeros en amasar una fortuna de 1.000 millones gracias a las criptomonedas.

Genesis fue una de las primeras empresas salpicadas por la quiebra de FTX, tras la cual anunció que buscaba una inyección de 1.000 millones de dólares y que paralizaba las retiradas de dinero del programa Gemini Earn.

Los Winklevoss emitieron un comunicado a través de su empresa en el que se consideraron víctimas de estafa por parte de Genesis y su matriz e indicaron que se defenderán de las acusaciones.