Caída que seguiría teniendo el dólar traería cambio en Colombia que sorprendería a muchos

El dólar en Colombia, en medio de las nuevas volatilidades, da cuenta de varios efectos sobre indicadores clave de la economía nacional, entre ellos a la inflación.

Se espera que una nueva apreciación del peso tenga un efecto secundario sobre lo que se prevé para el dato final del IPC para 2024.

Lo primero que habría que decir es que una nueva baja en el dólar en Colombia va a tener un efecto secundario sobre el dato de inflación dados los precios que, en el país, dependen de la tasa de cambio.

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Una de las consecuencias más importantes tendría en cuenta que un dólar más barato se materializa en menores precios para los empresarios que se encargan de hacer importaciones de insumos para la producción de los alimentos, o de aseo.

De hecho, ya el mismo Banco de la República había señalado que, en la medida en que la tasa de cambio suba, la inflación en el país no va a enfriarse sobre las expectativas del mercado.

Efectos del dólar en Colombia en la inflación

Las apuestas del mercado muestran que la tasa de cambio se mantendría estable y con una mayor tendencia de bajar, salvo que lleguen nuevos mensajes que generen incertidumbre sobre el comportamiento de la economía nacional.

En ese sentido, habrá que esperar nuevos anuncios del gobierno del presidente Petro sobre si buena parte de la agenda legislativa que inicia en julio va centrarse en sacar adelante la propuesta de Asamblea Constituyente y lo que pase con proyectos como la reforma laboral y la reforma a la salud.

En el horizonte habrá que esperar también si una eventual subida del precio del petróleo va a ayudar a que el dólar en Colombia siga bajando y todos los costos encadenados a esa moneda dentro de la inflación sigan desacelerando.

La expectativa del mercado, de momento, se sostiene en que el IPC va a tener una variación final en 2024 cercana al 5,5 %, pero aumentan las expectativas de aquellos que piensan que el indicador va a estar más cerca del 6 %.

Lo anterior supone que llegar a la meta del 3 % seguiría viéndose para la segunda mitad del año entrante.

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