DIAN pone la lupa sobre 228 empresas: buscan corregir $34 mil millones en autorretenciones 2025

La Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (DIAN) ha puesto en marcha un proceso de control sobre 228 empresas en Colombia, con el objetivo de verificar la correcta aplicación de las tarifas de autorretención en la fuente correspondientes al periodo entre mayo y noviembre de 2025. Esta medida, anunciada recientemente, contempla un posible saldo a regularizar cercano a los $34 mil millones, enfocado en garantizar la correcta liquidación y presentación de las declaraciones tributarias durante ese lapso. La acción toma como base la normativa establecida en los artículos 1.2.6.6. y 1.2.6.8. del Decreto 1625 de 2016, que regula las autorretenciones, adaptada según lo establecido en el Decreto 572 de 2025.

Según informó Luis Adelmo Plaza Guamanga, Director de Gestión de Fiscalización de la DIAN, el propósito de esta acción consiste en constatar que las empresas hayan determinado adecuadamente sus autorretenciones, tomando en cuenta la actividad económica principal que desarrollan. La meta es que, al identificar inconsistencias, los contribuyentes puedan enmendarlas de manera voluntaria, promoviendo así una mayor cultura de cumplimiento y aportando al fortalecimiento del sistema tributario nacional. Esta estrategia, por tanto, se orienta tanto a la prevención de irregularidades como a la creación de condiciones para que los contribuyentes respondan de forma proactiva frente a eventuales omisiones o errores en sus declaraciones.

Para definir a los contribuyentes objeto de la fiscalización, la DIAN empleó información proveniente del Registro Único Tributario (RUT), así como los datos contenidos en el Formulario 350 de declaraciones de retención en la fuente, además de otras bases institucionales. El análisis permitió identificar que la mayoría de los casos se concentran en las principales ciudades del país: Bogotá con 84 empresas, Medellín con 45, seguida de Cali y Barranquilla con 21 y 18 respectivamente. Además, dentro del grupo intervenido, aparecen siete empresas catalogadas como grandes contribuyentes, un segmento destacado por el volumen de sus transacciones fiscales.

La primera etapa de esta intervención tiene un carácter persuasivo en la que la DIAN invita a las empresas relacionadas a revisar y, si es necesario, justificar o corregir sus declaraciones voluntariamente. Solamente si, tras este proceso, persisten las inconsistencias, la entidad avanzará hacia actuaciones administrativas formales, siempre respetando el debido proceso y el derecho de defensa de los contribuyentes involucrados.

La DIAN subraya la importancia de que las empresas revisen de manera periódica el cumplimiento de sus responsabilidades fiscales. La correcta aplicación de las normas referentes a la autorretención resulta esencial para conservar un sistema tributario más justo, transparente y sostenible, según destacó oficialmente la entidad. Esta labor de fiscalización refuerza su mensaje sobre la importancia de la responsabilidad tributaria en beneficio de toda la sociedad.

¿Qué es la autorretención en la fuente y por qué es importante revisarla?

La autorretención en la fuente es un mecanismo tributario mediante el cual algunas empresas, según la actividad económica que ejercen, deben descontar directamente de sus propios ingresos una parte para anticipar el pago del impuesto sobre la renta. Este anticipo se realiza, normalmente, bajo lineamientos definidos en decretos como el 1625 de 2016. La importancia de revisar su aplicación radica en que un error o inconsistencia puede acarrear sanciones, requerimientos administrativos y ajustes significativos en las obligaciones tributarias de la empresa.

En el contexto del reciente anuncio de la DIAN, la correcta práctica de este procedimiento cobra un papel central en la prevención de problemas legales y financieros. Una adecuada autorretención facilita no solo el cumplimiento normativo sino también la transparencia en el manejo de las finanzas empresariales, asegurando que las contribuciones al sistema fiscal sean acordes con la realidad económica de cada compañía.