Titán Plaza no se deja de Unicentro (Bogotá) y anuncia novedad para junio: “Lado P"

De la misma forma como lo han hecho otros centros comerciales, de la talla de Unicentro, ahora Titán Plaza desplegó una estrategia para que este mes sea uno de los mejores en materia de ventas y también de impacto en el incremento de visitas.

Junio llega a Titán Plaza con un sentimiento especial: el reconocimiento y la celebración de esos hombres extraordinarios que llamamos papás. Este mes, los “consentidos” y protagonistas absolutos son ellos, y en el centro comercial Titán Plaza rendirán homenaje grandioso a través de su campaña: “Lado P de Papás”, del primero al 30 de junio.

Titán Plaza y Unicentro, en Bogotá, celebran el Día del Padre con estrategias comerciales

Durante todo el mes, Titán Plaza se convertirá en el epicentro de diversas actividades pensadas para celebrar y agasajar a los padres en su mes. Los visitantes podrán disfrutar de una programación especial que incluye música, exhibiciones y espacios para compartir en familia.

Unicentro, por su parte, tendrá actividades como “aeromensajería emocional”. Los visitantes pueden confeccionar aviones de papel con papel reciclado, en los que escriben mensajes dedicados a sus padres. Esta propuesta, además de incentivar la participación y la creatividad, promueve un mensaje de sostenibilidad y hace tangible la emotividad de la fecha. La actividad estará disponible durante los fines de semana del 6 al 8 y 13 al 15 de junio, de 10:00 a. m. a 6:00 p. m., en una zona de alta concurrencia ubicada frente a Arturo Calle, facilitando la integración de todos los miembros del núcleo familiar.

¿Por qué se celebra el día del Padre?

Junio se ha convertido en el tercer momento dorado para el comercio colombiano, solo superado por la Navidad y el mes de las madres. De acuerdo con Raddar, el gasto de los hogares en este periodo asciende al 6,06 % de las ventas anuales, una cifra que resume la potencia de un mes donde convergen varios motores de consumo.

Al tradicional Día del Padre, celebrado desde 1962 cada tercer domingo de junio tras adoptar la costumbre estadounidense, se suman el desembolso de la primera prima salarial del año, el inicio de las vacaciones escolares de mitad de año y la sucesión de tres fines de semana con puente festivo, combinación que amplía los días de alto tráfico en los centros comerciales y estimula tanto compras emocionales como de reposición.

La fecha dedicada a papá, inspirada en la historia de Sonora Smart Dodd, una joven de Spokane, Washington, que escuchó en 1909 un sermón sobre el recién instituido Día de la Madre y propuso honrar también a su padre, William Jackson Smart, veterano de la Guerra Civil que había criado solo a sus seis hijos. Gracias a su iniciativa, Spokane celebró el primer Día del Padre el 19 de junio de 1910 con sermones y obsequios para los padres de la ciudad, sentando el precedente que décadas más tarde se extendería por todo Estados Unidos y el mundo.

Se popularizó en Colombia gracias a las radios y revistas de la década del sesenta, que promovían obsequios masculinos entonces poco habituales, como máquinas de afeitar eléctricas y relojes automáticos.

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El arraigo fue tal que, cuatro décadas después, la Ley 911 de 2004 oficializó la conmemoración. En la región, México comparte el mismo domingo de junio, mientras Brasil prefiere agosto y Uruguay julio, ajustes que responden a calendarios escolares y climáticos; sin embargo, todos coinciden en la oportunidad comercial: en Brasil las ventas del “Dia dos Pais” ya representan cerca del 5 % del retail anual, y en México rondan el 6,5 %.

Como dato curioso, el primer anuncio de un regalo para el Día del Padre en la prensa colombiana apareció en 1964: la Joyería Bauer ofrecía un par de mancornas de oro. Sesenta años después, las opciones se han multiplicado; hoy los obsequios van desde relojes inteligentes y audífonos hasta cenas temáticas o escapadas de fin de semana. Esta evolución revela a un consumidor más exigente, que valora tanto la experiencia como el producto. Por eso las ventas de junio sirven de termómetro para medir el poder de compra y la confianza de las familias antes de encarar la segunda mitad del año.