Aumentar impuestos a licores: el sector nocturno de Colombia en alerta por riesgo de quiebra y empleo

La Asociación de Bares de Colombia, conocida como Asobares, manifestó un profundo rechazo ante la posible expedición de un decreto de emergencia económica por parte del Gobierno Nacional, el cual contemplaría el aumento de los impuestos a los licores. De acuerdo con el comunicado emitido por Asobares, esta iniciativa representaría un impacto negativo considerable para el comercio formal dedicado a la vida nocturna, lo que pondría en riesgo la estabilidad económica y social de bares, discotecas, gastrobares, restaurantes y otros establecimientos de entretenimiento en el país.

Según Asobares, el sector nocturno aún no ha conseguido superar las secuelas generadas por la pandemia. A los desafíos aún vigentes se suman factores como la inflación, los constantes incrementos en los costos laborales, los elevados valores de los arriendos y la presión de los impuestos territoriales, así como recientes reformas que han incrementado de forma significativa los insumos básicos y los gastos asociados a la operación de estos negocios. Para los representantes de la economía nocturna, el intento por imponer una mayor carga impositiva a los licores supone, además de una desconexión con la realidad que atraviesan, una política regresiva y contraproducente.

En este contexto, Asobares insiste en que nuevas cargas tributarias afectarían directamente la principal fuente de ingresos del sector: la venta de licores. Además, advierten que historias pasadas muestran que el incremento de impuestos no asegura mayores ingresos fiscales; por el contrario, cuando se han tomado estas medidas en ocasiones anteriores, se han presentado caídas en las ventas legales, aumento del contrabando y adulteración de bebidas, y una mayor afectación al comercio formal, con la consecuente pérdida de empleos.

Datos proporcionados por Asobares indican que la economía nocturna sostiene cerca de 1.680.000 puestos de trabajo, tanto directos como indirectos, con fuerte participación de jóvenes (28 %) y mujeres (54 %), dinamizando actividades transversales como el turismo, la gastronomía y la vida urbana en las principales ciudades del país.

La organización remarca que un aumento de impuestos en este mercado implicaría riesgos adicionales para miles de pequeños y medianos empresarios, muchos de los cuales mantienen negocios familiares y operan bajo márgenes de ganancia cada vez más estrechos. Desde Asobares insisten en que no se puede seguir visualizando a este sector como una “fuente inagotable” de recursos fiscales, ya que enfrentar nuevas cargas tributarias podría poner en jaque la formalidad, la competitividad y la seguridad económica nacional.

Frente al actual debate, el gremio solicita que las decisiones tomadas bajo una supuesta emergencia económica sean realmente extraordinarias, proporcionales y consensuadas con los actores involucrados. El llamado de Asobares al Gobierno es a que se revalúe la medida, se propicien espacios de diálogo técnico con los gremios y se analicen opciones responsables que no promuevan el desempleo ni fomenten la informalidad o la ilegalidad en la economía nocturna colombiana.

¿Por qué la economía nocturna es tan significativa para Colombia? El papel de la economía nocturna va más allá del entretenimiento; éste sector juega un rol esencial en la generación de empleo y en la dinamización de actividades conexas como el turismo y la gastronomía. De acuerdo con la Asociación de Bares de Colombia, concentra más de 1,6 millones de empleos, constituyéndose en un motor económico para jóvenes y mujeres, y contribuyendo de manera sustancial al tejido social y urbano de las ciudades colombianas.

La posible afectación de este sector por una mayor carga impositiva no solo incidiría en sus niveles de operación, sino que también tendría un impacto directo sobre otras industrias y sobre el desarrollo cultural y social del país, razón por la cual el debate sobre estos tributos reviste una importancia estratégica en el presente contexto colombiano.

¿Qué implica un decreto de “emergencia económica”? Un decreto de emergencia económica es una herramienta legal que permite al Gobierno Nacional adoptar medidas excepcionales y transitorias en situaciones críticas que amenacen la estabilidad económica del país. Por lo general, su utilización está sujeta a condiciones rigurosas, debe responder a hechos extraordinarios y tiene límites tanto en su duración como en su alcance, requiriendo sustento técnico y consulta con los sectores afectados, como lo reclama la Asociación de Bares de Colombia en este caso.