Cada vez que se quiere salir a la calle, muchas personas se maquillan para verse mejor arreglados y tapar imperfecciones que hayan en la piel, como acné, por ejemplo. Para eso, utilizan brochas de maquillaje que ayudan a que estos cosméticos queden mejor distribuidos en la piel, dando una sensación de firmeza y uniformidad.
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Sin embargo, el problema es que algunas mujeres utilizan estas brochas prácticamente todos los días, pero por el afán o simplemente porque no caen en cuenta, no las lavan, lo cual podría ocasionar un problema importante para la piel. Por eso, es importante saber cuándo y por qué hay que limpiar de la mejor manera estos elementos y así evitar consecuencias dermatológicas luego.
Por qué es importante limpiar las brochas de maquillaje
La limpieza regular de las brochas de maquillaje es esencial por tres razones principalmente:
- Higiene: las brochas acumulan aceites naturales de la piel, restos de maquillaje y bacterias con el tiempo, lo que puede causar problemas dermatológicos si no se eliminan adecuadamente.
- Aplicación de maquillaje: las brochas sucias pueden afectar la aplicación del maquillaje, dando como resultado una cobertura irregular o poco uniforme.
- Durabilidad: mantener las brochas limpias prolonga su vida útil, evitando la degradación de las cerdas y el deterioro de los mangos.
Cada cuánto hay que limpiar las brochas de maquillaje
La frecuencia de limpieza de las brochas de maquillaje depende del uso y del tipo de producto que se aplique. Aquí hay algunas pautas generales:
- Brochas de base y corrector: deben limpiarse después de cada uso, ya que a menudo entran en contacto con productos líquidos o cremosos.
- Brochas de sombras y rubor: pueden limpiarse semanalmente si se usan con regularidad.
- Brochas de polvos: pueden limpiarse cada 2 a 3 semanas, ya que los productos en polvo tienden a acumular menos residuos.
- Esponjas y ‘beauty blenders’: estos deben lavarse después de cada uso debido a su alta absorción de productos y su rápida acumulación de bacterias.
Cómo se deben limpiar las brochas
El proceso de limpieza de las brochas es simple pero crucial:
- Utiliza un limpiador adecuado: puede usar un limpiador específico para brochas o jabón suave. Aplique el producto en las cerdas húmedas.
- Limpieza y enjuague: frote suavemente las cerdas para eliminar el maquillaje y las impurezas. Enjuague con agua tibia hasta que el agua salga limpia.
- Secado: deje que las brochas se sequen al aire libre, preferiblemente en posición horizontal, para evitar que el agua penetre en el mango.
(Ver también: Aprenda a aplicar el maquillaje como una experta con estos ‘tips’ esenciales en su rutina)
Tenga en cuenta que mantener las brochas de maquillaje limpias no solo garantiza una aplicación efectiva, sino que también contribuye a una piel más saludable.
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